Ambientalistas alertan sobre riesgo en isla Melones

Ambientalistas alertan sobre riesgo en isla Melones


Los daños ambientales causados por el derrame de petróleo en el golfo de México han sido catastróficos. Y aunque Panamá no es productor del llamado “oro negro”, también podría enfrentarse, si no se toman las medidas correspondientes, a un desastre que, incluso, podría afectar el tránsito por el Canal.

A la única isla que actualmente tiene autorización para almacenar combustible -Taboguilla, donde opera Decal S.A- se sumaría otra más. La empresa Burkell Holding Inc. proyecta construir en isla Melones, distrito de Taboga, una terminal marítima y tanques para el almacenamiento y la distribución de hasta 2 millones de barriles de productos derivados del petróleo.

Los ambientalistas alertaron sobre el riesgo de construir otra terminal fuera del continente. “Tenemos que mirarnos en el espejo de lo que está ocurriendo en el golfo de México. Aunque no podemos compararlo, porque no es la misma cantidad de petróleo la que se almacena, sí es preocupante por su cercanía a las costas”, advirtió el director legal del Centro de Incidencia Ambiental, Félix Wing.

A simple vista, Wing asegura que las áreas afectadas por un posible derrame serían las costas que van desde el río Bayano hasta la ciudad de Panamá.

Por su parte, José González Jaramillo, de la organización Oilwath, considera que es “irresponsable de parte del Gobierno aumentar el parque de almacenamiento de hidrocarburos que se traduce en la multiplicación de los impactos ambientales, sin haber hecho una evaluación integral de los impactos que esta industria ha tenido en el país, sobre todo en mares y costas en zonas de tránsito”.

Para la realización de la obra, Burkell Holding Inc. solicitó a la Autoridad Marítima de Panamá (AMP) una concesión de 9 mil 672 metros cuadrados de ribera y fondo de mar. El contrato fue refrendado el pasado 10 de mayo de 2010. Adicionalmente, está pidiendo un área aproximada de una hectárea de ribera y fondo de mar para otro tipo de actividades, solicitud que fue objetada por algunos miembros de la junta directiva de la AMP, quienes pidieron que se especifique qué otro tipo de actividad se realizará.

Sobre la isla, que tiene 3 hectáreas con 7 mil 924 metros cuadrados, se instalarán 12 tanques para almacenar 2 millones de barriles de bunker y diésel. El monto estimado de la obra es de 43 millones de dólares.

El proyecto ya cuenta con un estudio de impacto ambiental aprobado. En el documento se planteó el riesgo de un posible derrame de hidrocarburo y de otros compuestos derivados del petróleo en la zona.

En el estudio, que fue aprobado en febrero de 2008, se incluyó un estudio de la empresa Ocean Pollution Control S.A., el cual determinó que en caso de ocurrir un derrame, el combustible podría afectar la costa de Veracruz, punta Brujas, punta Salazar, isla Chamá, isla de Otoque, la bahía de La Chorrera y de Chame, todas en el área del Pacífico panameño, que sirve también de entrada a los barcos que transitan por el Canal.

La llegada del hidrocarburo a las diferentes costas e islas dependerá de la dirección del viento, y el tiempo de llegada a las costas también varía entre 6 y 48 horas, dependiendo de la cercanía de los lugares.

LAS MÁS LEÍDAS