La Autoridad Nacional del Ambiental (Anam) concluyó que el incinerador para basura de barcos, que construye en Colón la empresa Ships Incineration Services and Plus (Sisapsa), vinculada a la familia del ex vicepresidente Rubén Arosemena, incumple las normas sanitarias, y advirtió que “puede llegar a ser un riesgo para la comunidad más cercana (Gold Hill) por la posible generación de dioxinas y furanos”.
El informe técnico presentado este año por la dirección de protección de calidad ambiental de Anam ratificó que el incinerador se construye a solo 433 metros de los límites de la comunidad Gold Hill, ubicada en Coco Solo, “incumpliendo con el Decreto Ejecutivo 293 de agosto de 2004, el cual establece las normas sanitarias para la construcción y operación de sistemas de incineración.
Según la norma, la distancia mínima de un incinerador debe estar a 1.5 kilómetro de la población más cercana.
Este informe también fue enviado a la oficina de asesoría legal de la propia Anam para evaluar el inicio de un proceso administrativo por incumplimiento de la norma sanitaria, a fin de establecer posibles multas o sanciones contra la empresa.
Luis Modesto Castaner, secretario de Sisapsa y cuñado del ex vicepresidente Arosemena, dijo que la empresa está dispuesta a adecuarse a todas las recomendaciones que le haga la Anam, sin embargo la estructura ya está construida en las cercanías de la barriada Gold Hill.
“Este es un recinto portuario. El proyecto está donde debe estar”, reiteró Castaner a este diario, tras señalar que la comunidad de Gold Hill nunca va a reconocer este proyecto.
Ángel Ardines, dirigente de la comunidad Gold Hill, habitada por 49 familias, señaló que, aunque la Anam ya se pronunció en contra de la ubicación de esteincinerador, aún hay “un silencio cómplice” de parte de las autoridades del Ministerio de Salud.
Según Ardines, la preocupación por este problema está latente porque la empresa ya construyó toda la estructura y solo hace falta poner en operación el incinerador.
“Hay un malestar en la comunidad porque en el Ministerio de Salud no se toman acciones en concreto contra esto”, agregó Ardines.
Los residentes le han solicitado a Eduardo Lucas Mora, director nacional de Salud, que se pronuncie sobre el proyecto, pero a la fecha no lo ha hecho.
Este diario ubicó a Lucas Mora y le planteó la queja de los residentes de Gold Hill en Colón, pero dijo que en el momento se encontraba ocupado.
En 2008, Mayra Botacio, técnica de salud ambiental del Ministerio de Salud, emitió una opinión sobre el incinerador de Sisapsa: “el estudio presentado deja ver que el proyecto en mención no cumple con la normativa en cuanto a la materia. El Minsa lo rechaza por incumplimiento”.
Además del permiso sanitario de operación, a la empresa Sisapsa también le hace falta el permiso de operación de la AMP.
El nuevo socio de la empresaCuando Sisapsa empezó el trámite para su concesión, Rubén Arosemena era el administrador de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP). Como representantes de la empresa aparecían, en ese momento, Carlos Díaz Capriles y Fotis Lymberópulos, este último, hermano de Dionisio Lymberópulos, para esa fecha también directivo de la AMP por designación del propio Arosemena.
Con la salida de Arosemena de la AMP, su cuñado Modesto Luis Castaner asume como presidente de Sisapsa. Ahora la empresa sumó a otro socio, Mario Medaglia, quien tomó el puesto de presidente de Sisapsa, y Castaner pasó a ser secretario. Castaner evitó hablar de la suma en que Medaglia compró su participación.