Los polémicos “camarones legislativos” que ha aprobado la Asamblea Nacional violan su reglamento interno y la Constitución, advirtieron ayer dirigentes de la sociedad civil organizada.
El último “camarón” fue introducido esta semana durante el segundo debate del proyecto de ley que reforma la ley que creó la Secretaría Nacional de Discapacidad (Senadis). En el documento se incluyó un artículo para que el nuevo director de la Autoridad de Recursos Marinos y Pesqueros (ARAP), Franklin Kwai Ben, pudiera ser ratificado.
Según Carlos Gasnell, de la Fundación para el Desarrollo de la Libertad Ciudadana, el artículo 148 del reglamento interno de la Asamblea establece el mecanismo para proponer modificaciones, y la prohibición de introducir “materia extraña” en las discusiones, en segundo debate, de un proyecto de ley.
“Si revisamos los procedimientos llevados a cabo en las discusiones de muchos proyectos de ley, se observa que en el segundo debate se incluyen aspectos totalmente ajenos a la norma aprobada en el primer debate”, dijo Gasnell .
En ese sentido, advirtió que la propia Asamblea ha venido violentando procedimientos constitucionales para la aprobación de leyes, su propio reglamento interno y los principios contenidos en su manual de técnica legislativa.
Al igual que Gasnell, Angélica Maytín, presidenta ejecutiva de Transparencia Internacional capítulo de Panamá, cree que los diputados deben dejar esta práctica, ya que con ella se pretende engañar a la ciudadanía. “ Cuando se quiera aprobar una ley, se debe discutir a plenitud y no introducir normas que nada tienen que ver con el tema central de la ley en discusión”, acotó Maytín.
Esta Asamblea también aprobó –dentro de una ley del récord policivo– reformas a la revocatoria de mandato, y dispuso encarcelar a los que cierren calles. En la Ley 30 sobre aviación aprobó reformas a tres códigos y a otras seis leyes nacionales.