William Jefferson Bill Clinton está cercano a los 65 años de edad. Su elocuencia y dominio de la temática social y política le permiten disimular el tono de su voz, que ya se escucha cansado. En su intervención “Embracing our common humanity” (Abracemos nuestra humanidad común), que presentó la noche del pasado sábado en Panamá, el presidente número 42 de Estados Unidos enmarcó su ponencia con pensamientos enfocados principalmente en la lucha contra la pobreza, la conquista del desarrollo y el medio ambiente.
La conferencia estaba anunciada para las 9:00 p.m. comenzó 15 minutos después, pero las puertas del salón se abrieron desde las 8:00 p.m. En el backstage, el presidente, Ricardo Martinelli y su esposa, Marta, junto al canciller, Juan Carlos Varela y otro grupo de familiares y allegados se fotografiaron con Clinton. Por su parte, el alcalde capitalino, Bosco Ricardo Vallarino, le entregó las llaves de la ciudad, según confirmaron los organizadores del evento.
Para ver a Clinton había que pagar boletos que iban de 125 a 400 dólares por persona. La empresa organizadora, Magic Dreams, calculó que acudirían mil 8 personas. Finalmente, la ocupación fue de un 65%.

