Hasta el momento, 10 dirigentes del Partido Revolucionario Democrático (PRD) mantienen firme su aspiración de convertirse en el próximo candidato presidencial de este colectivo.
Sin embargo, no todos aceptan someterse a la consulta del 12 de febrero de 2012 en la que se escogerá a la “figura representativa” del partido de cara a los comicios de 2014. Al menos dos condicionan su participación a la definición explícita de las reglas del juego.
La negativa radica en que el Tribunal Electoral (TE) advierte que esta consulta no es vinculante. En otras palabras, independientemente de los resultados de la consulta, el PRD tendrá que realizar primarias en enero de 2014 y, por lo tanto, no hay garantías de que el favorecido sea el candidato final del partido.
Con excepción de Anel Flores y Laurentino Cortizo, han confirmado su participación Balbina Herrera, Juan Carlos Navarro, Javier Acha, Vicente Magallón, Manuel Bermúdez, Samuel Lewis Navarro y Juan Carlos Arosemena. Omar José Torrijos Pauzner no confirmó ni negó su participación. Se limitó a decir que “lo importante es garantizarles a los afiliados del PRD un proceso claro y vinculante de elegir a sus candidatos”.
Todos ellos llevan meses haciendo proselitismo en reuniones, encuentros con dirigentes, y caminatas en distintos puntos del país.
Cortizo dijo que participará de la consulta siempre y cuando esta tenga validez jurídica o coercitiva. “Requiero todas las garantías para participar de la consulta, ya que ningún partido es un convento de monjas; siempre se pactan acuerdos pero no se cumplen”, sostuvo Cortizo, tras exhortar al partido a esperar los resultados de las propuestas de modificaciones al Código Electoral.
En esa misma línea opinó Flores, al señalar que “participará siempre y cuando haya las garantías de transparencia y pureza en el sufragio, que dicha consulta tenga el aval del TE, y cumpla con la ley electoral”.
