Líderes opositores de los gobiernos de Argentina, Bolivia, Venezuela, Cuba y Nicaragua denunciaron ayer que en estos países no se respetan los principios fundamentales para el ejercicio de la democracia y lamentaron que este tema haya sido omitido en la agenda de la VII Cumbre de las Américas.
La denuncia se hizo en el foro “La otra cara de la moneda” –que organizó la Fundación Libertad de Panamá y el Instituto Interamericano para la Democracia–, que tuvo como expositores al expresidente de Ecuador Osvaldo Hurtado; la activista cubana María Werlau y el exdiplomático venezolano Diego Arria.
El expresidente Hurtado recordó que las dictaduras no corresponden únicamente a militares, sino que hay “políticos civiles” electos por los pueblos que han reemplazado la Constitución de sus países por decretos que les conceden poderes absolutos.
Hurtado lamentó la exclusión de “esta realidad” en la VII Cumbre de las Américas y –sin precisar nombres– cuestionó que estos “políticos civiles” busquen gobernar de por vida, eliminando la alternancia política para, en su lugar, establecer una presidencia vitalicia mediante la reelección indefinida.
En 2014, el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, propuso reformar la Constitución de su país para permitir la reelección indefinida de presidente y otros cargos.
En tanto, Werlau –que dirige la organización de derechos Humanos Cuba Archive– destacó que en su país hay una “dictadura militar con un gigantesco aparato represivo controlado por una monarquía familiar”.
La activista cubana advirtió que su gobierno pretende hacer reformas políticas que no son más que distracciones para que los hijos del presidente de Cuba, Raúl Castro, asuman el poder en un acto de relevo generacional.
El exdiplomático Diego Arria criticó que haya gobernantes de América Latina que no se atreven a condenar las violaciones de derechos humanos del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a quien acusó de buscar firmas en Cuba contra el decreto del presidente estadounidense Barack Obama que considera a Venezuela una amenaza para la seguridad de su nación.
Además, en el foro participaron el diputado nicaragüense Pedro Chamorro; el exsenador boliviano Carlos Klinsky y Guillermo Losteau, en representación de Argentina, quienes abordaron la realidad política y social de sus países.Al final, los oradores suscribieron un documento condenando la persecución de voces críticas, el encarcelamiento o exilio de dirigentes opositores, la utilización de la justicia como medio de represión política y la violencia ejercida contra los ciudadanos de esas naciones, e hicieron un llamado para que los gobernantes de las Américas cumplan la Carta Democrática Interamericana y se condene enérgicamente a aquellos mandatarios que la irrespeten.