La investigación al director de la Policía Nacional, Gustavo Pérez, enfrenta un importante obstáculo.
La principal evidencia en su contra –el informe de su proceso disciplinario que fue filtrado a los medios de comunicación, y que supuestamente comprobaría su complicidad en un plan para secuestrar a ciudadanos estadounidenses el 20 de diciembre de 1989– no aparece. Misteriosamente el documento desapareció de los archivos de la institución.
En esa época, Gustavo Pérez era el segundo al mando de Unidad Anti Terror (UESAT) de las extintas Fuerzas de Defensa.
“El proceso disciplinario en contra del director no reposa en la entidad, solo los informes de sus ascensos”, afirmó en conferencia de prensa la directora de asesoría legal de la Policía, Yasmín Ramírez.
Lo sucedido coincide con el traslado de unos archivos de la Policía Nacional a unas oficinas localizadas en Balboa, la semana pasada. El vocero de la entidad, Roberto Ballesteros, explicó que el cambio se hizo por trabajos de remodelación en el Departamento de Archivo.
La mudanza también coincidió con el traslado de nueve funcionarios de dicho departamento de la institución, de la sede de Ancón hacia la provincia de Colón.
Lo sucedido provocó que la Policía Nacional organizara un recorrido con los periodistas a las instalaciones del Departamento de Archivo, oficinas que salvaguardan los expedientes de la institución desde el año 1983.
Mientras que en el Ministerio Público, el ex director de la Policía Nacional Ebrahim Asvat rindió declaración jurada dentro del expediente abierto por el procurador, Giuseppe Bonissi, por el supuesto secuestro cometido por el jefe policial.
Asvat explicó que en el expediente hay recortes de las publicaciones realizadas por los medios, y las declaraciones que rindieron sobre este caso el ex procurador Rogelio Cruz, el ex director de la Policía Nacional Oswaldo Fernández y el ex director de la antigua Policía Técnica Judicial Jaime Abad.
Asvat comentó que el procurador Bonissi debía solicitar las declaraciones de los miembros de la junta disciplinaria de la Policía que decidiera la baja de Pérez, entre ellos Miguel Alemán, José María Serrano y Gerardo García, todos de las ex Fuerzas de Defensa.
“Antes de citar a una persona como yo, debieron citarlos a ellos”, advirtió Asvat.
