La empresa La Reserva, de inversionistas estadounidenses, decidió romper el silencio y denunció ayer que en la Autoridad Nacional del Ambiente (Anam) le pidieron alrededor de 100 mil dólares por aprobar el estudio de impacto ambiental de su proyecto residencial.
El gerente de La Reserva, Armando Silvestre, indicó que se trató de Francisco Garzón, un asesor que responde a la subadministradora de la Anam, Melanie Castillo.
Silvestre aseguró que en marzo pasado participó de una reunión en la residencia del dueño de La Reserva, Petter Fisher, ubicada en Coco del Mar, en donde Garzón les propuso agilizar la aprobación del estudio que tiene más de nueve meses de espera, a cambio de dinero.
Incluso, Silvestre dijo que Garzón prometía reuniones con altos funcionarios, y la presentación de su proyecto ante el Consejo de Gabinete a orillas del lago Gatún.
La empresa sostuvo que no presentó la denuncia en su momento porque el estudio parecía avanzar dentro de la Anam, pero ahora dice que llevará el caso a la Fiscalía Anticorrupción.
El propio Fisher le presentó la denuncia contra Garzón al administrador de la Anam, Javier Arias, el pasado lunes. Arias confirmó la reunión con Fisher y dijo que iba a ordenar una investigación. Este medio no pudo conseguir ayer la versión de Garzón.
VEA Separan a asesor de la Anam
