Alcibiades Vásquez estudió Inteligencia, contraingeligencia y guerra política en Taiwán, y piensa que eso le da seguridad para cometer menos errores. Hoy habla de sus amigos, sus no tan amigos, sus negocios, aspiraciones fallidas y familiares nombrados, entre otras.
Usted quiere volver a ser secretario del panameñismo y Beby Valderrama quiere el mismo cargo. ¿No cree que lo van a transar?
Aspiro a la unidad del partido, aunque me toque deponer algunas aspiraciones. No todas, ja, ja.
¿Qué negociaría?
Una Vicepresidencia…
¿Y si queda Katleen Levy, de quien no pensó que le ganaría en 2014? A falta de mujeres, la consideran...
Si lo logra, bienvenida. Que busque los votos...
Los presidenciables del panameñismo.
Mario Etchelecu, Carlos Duboy y Melitón Arrocha son los que escucho que se comentan. Ah, y Blandón...
Ahí está pintado: su amigo Mario primero y su enemigo Blandón último.
Jajaja. Mala. No lo veo como mi enemigo. No seas así.
¿Sigue siendo socio de José Muñoz en ‘Radio Panamericana’?
No. Desde 2013 no.
¿Y en la arenera?
No. Nunca. En nada más.
¿Mireya Moscoso no le dio concesiones?
Gestionamos a través de un tercero, pero en mi caso no prosperó.
Lloraban que eran los menos favorecidos, pero les acabó yendo bien…
Yo en el gobierno de Mireya no tuve notarías ni concesiones ni consulados...
Pero en el de Martinelli a su esposa la nombraron cónsul en Amberes, ¿no?
A una pariente, sí.
Y ella misma es ahora directora administrativa de la Autoridad Marítima...
Sí.
¿Y tiene a un sobrino nombrado en el Mides, no?
Estuvo, pero ahora está en el Ministerio de Gobierno.
¿Y por qué se le ve tanto en el Mides?
Como es pariente, viene y me visita, pero trabaja allá.
¿Qué otros parientes tiene nombrados?
Un primo en el BDA, mi sobrino en el MIVI, mi hermano con 30 años en el Idaan y una hermana que tiene añales en el Seguro.
Usted, Muñoz y Fábrega fueron los responsables de la ruptura del pacto de La Pintada, que le daba mayoría legislativa a Mireya. Al perderla se fortaleció el PRD y Martín Torrijos ganó. ¿No le da culpa?
No, porque me opuse al uso del fondo fiduciario para pagar deudas.
¿No buscaban la Presidencia de la Asamblea con apoyo del PRD?
No. Ni soñaba con eso.
En 2010 el acuerdo panameñista era que Blandón presidiría Presupuesto. Usted quiso lo mismo. La noche antes de la elección a Luis Lay lo llamaron a ‘reunión’ y al día siguiente usted ganó por un voto. ¿A él lo suavizaron con un ‘cariño’?
Creo que fue un cruce de votos y nos comprometimos a apoyarlo en otra comisión.
¿Sí? Pero él no presidió ninguna comisión…
Pero aspiraba a pertenecer a comisiones disputadas, como miembro.
Voy a 2011. Usted era el candidato del panameñismo y su amigo Muñoz lo traicionó. CD no lo apoyó y Muñoz planeó eso...
Se dice... yo paso páginas.
Sus colegas siempre se preguntaron por qué no solo no le reclamó eso a Muñoz, sino que siguió viéndose con él a espaldas de ellos.
Teníamos una relación comercial por definir.
Pero la terminaron dos años después...
El proceso tomó tiempo...
Ese día los panameñistas consiguieron los votos de los PRD y usted dijo que con esos votos usted no corría. Y así ganó Héctor Aparicio. O sea, Martinelli.
No, yo le dije a Martinelli que, aunque sacara un voto, me iba a postular porque ese era el acuerdo de la alianza.
¿Y por qué los panameñistas cuentan eso así?
No sé. Además, un grupo del PRD, coordinado por Jimmy [Papadimitriu], ya apoyaba a CD.
Sus colegas pensaban que usted se estaba entendiendo con Martinelli…
De ninguna manera.
Usted no era tan duro con Martinelli…
Fui firme y respetuoso.
¿Por qué Martinelli nunca lo atacó duramente?
Me hicieron auditorías y botaron a familiares, hasta a mi hermano, con 30 años en el Idaan. Luché y lo reintegraron. Pero no andaba cacareando y llorando por ahí.
¿Ese es el hermano que saltó al Molirena?
No, ese es otro.
En 2013 Martinelli, en un discurso, le agradeció a su gente y a usted...
Siempre fue astuto. Yo fui el primer sorprendido.
¿Usted tenía diferencias con la dueña de Gucci antes del lío, verdad?
De estilo y prioridades, pero había respeto.
Ella es esposa del secretario del Minsa que movieron del cargo por cuentos turbios. ¿Ella se va del todo o tendrá la suerte de él?
El presidente decidirá.
Usted no estaba en el Gabinete original. Le habían dado Ampyme. ¿Qué tamborito hizo?
Ninguno, pero le agradezco a muchos que vieron bien que estuviera en el Mides.
Los que hicieron tamborito por usted, pues.
Exacto.
¿Por qué no fue contralor? Quería, y los PRD lo iban a apoyar...
Porque se me veía como una figura muy política.
¿Todavía chinguea maquinitas?
Hace rato no. Eso lo dejé.
¿Por qué anda con tintas tibias en el caso de Idalia Martínez?
Presido la directiva del Seniaf, no la nombré y no ha habido acusación formal.
¿Es conciliadora?
No. Debe mejorar eso.
¿Cumple con su labor a favor de la niñez?
Hace el esfuerzo.
¿Por qué no promueve la ley de educación sexual si es un problema social?
Lo hemos hecho a solicitud de la Asamblea.
¿Cuándo y dónde?
Hace como un año nos pidieron una opinión escrita.
Hablo de promover la educación sexual.
Hagamos un debate nacional...
¿Cómo va su investigación como exdirectivo del PAN en el gobierno pasado?
Bien, tengo las actas de las pocas directivas a las que me invitaron.
¿Qué opina del caso de su amigo Etchelecu?
Él ha explicado que lo que compró lo usó.
Eso no se cuestiona. Usted criticó el fraccionamiento de compras de CD…
Por los sobrecostos.
Y el fraccionamiento.
No apoyo esa figura…
¿Qué le decía Ferrufino en la transición?
Que el Mides era “complejo, pero muy bonito”.