La clausura de la Cumbre de los Pueblos –actividad paralela a la Cumbre de las Américas– estuvo marcada por el desorden y la improvisación. El programa, previamente establecido para el acto de ayer, fue cambiado y desde las 11:00 a.m. funcionarios del Servicio de Protección Institucional (SPI) y de la seguridad de Cuba se tomaron las instalaciones del paraninfo de la Universidad de Panamá (UP).
Todo ello, con el propósito de extremar las medidas de seguridad porque para la clausura asistirían los presidentes Nicolás Maduro (Venezuela), Raúl Castro (Cuba), Evo Morales (Bolivia), Rafael Correa (Ecuador), Salvador Sánchez (El Salvador) y Daniel Ortega (Nicaragua).
La sesión plenaria se inició a las 9:00 a.m. con cuatro conferencias y la lectura de informes de cuatro de las 15 mesas de trabajo.
El evento suspendido y reanudado a las 2:00 p.m. en el auditorio de la Facultad de Derecho de la UP. Allí se presentaron los informes de las restantes 11 mesas de trabajo y se aprobó la Declaración de Panamá.
Tanto en los informes de las mesas de trabajo como en la Declaración de Panamá, el común denominador fue la petición de que Estados Unidos derogue el decreto en el que considera a Venezuela como una amenaza. Además, dieron su respaldo a los gobiernos de Ecuador, Bolivia y Cuba.
En lo que a Panamá se refiere, exigieron que el 20 de diciembre sea declarado como día de duelo nacional y solicitaron que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pida perdón público por los desaparecidos y muertos que dejó la intervención militar de 1989.
Concluida la sesión plenaria, los periodistas de medios de comunicación fueron llevados a un salón contiguo a la Facultad de Derecho. En ese lugar pasaron la revisión de explosivistas del SPI y de Cuba.Luego de cuatro horas de espera, dejaron ingresar al salón de actos solo a un reportero gráfico de cada medio de comunicación. Ya eran las 7:30 p.m. El resto de periodistas observó la clausura en una pantalla de circuito cerrado, desde una improvisada sala de prensa.
Los organizadores de esta Cumbre, del Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Construcción y Similares (Suntracs) y del Frente Nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales (Frenadeso), no dieron explicaciones sobre los retrasos. Las calles y entradas a la UP fueron restringidas hasta antes de la llegada de los mandatarios.
La clausura arrancó a las 9:00 p.m. solo con la presencia del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. Media hora después se presentó el gobernante ecuatoriano, Rafael Correa.
Maduro y Correa ofrecieron cada uno su discurso ante representantes de las organizaciones sindicales, sociales y trabajadores de la región.Correa volvió a arremeter contra los medios. Calificó a la prensa latinoamericana de “muy mala”, porque responde a intereses de élites.
“Cuando las élites latinoamericanas afirman que no hay libertad de prensa es porque sus medios ya no tienen impunidad”, dijo Correa. Alegó que los monopolios mediáticos no contribuyen con la verdadera democracia.

