A sus 91 años, Rosario Mami Arias de Galindo sigue siendo una firme defensora de la libre expresión. Tenacidad, claridad y coherencia definen su personalidad.
¿Peligra la libertad de expresión en Panamá?
Sí. La libertad de expresión o se arranca con un golpe o simplemente no se respeta, como pasa ahora.
¿Qué aprendimos en 20 años de democracia?
Muy poco.
¿Está el público consciente de las amenazas que se ciernen sobre la libertad de expresión?
No. Solo un sector pequeño que vivió la dictadura.
Usted logró recuperar su empresa tras años de expropiación. ¿Es posible hoy un escenario de ese tipo, a la luz de la mala relación del gobierno con los medios?
No creo que este gobierno llegue a eso, pero hay métodos que está usando para impedir la libre expresión.
¿Como cuáles?
Reclamos de noticias aún cuando no están erradas, y envío de recados y auditores a los periodistas.
¿Que opina de ex civilistas convertidos hoy en perseguidores? ¿Cambiaron sus convicciones o nunca fueron realmente civilistas?
Nunca lo fueron. José Raúl Mulino defendió el civilismo y ahora acepta todo lo que está pasando. También está el PRD, que no dijo una palabra cuando nos quitaron Panamá América, y hoy defiende la libertad de expresión.
Redes sociales: ¿amenaza u oportunidad para los medios?
Depende cómo se usen. En Panamá son una amenaza por la ignorancia y falta de interés de los medios.
¿Qué le falta al periodismo hoy?
Cultura del periodista.
¿Periodismo de antaño frente al de ahora?
El de antaño no tenía tecnología; al de ahora le falta pasión. Pero como no se puede retroceder, me quedo con el de ahora...
¿Qué legado cree usted que le dejará al país?
La tenacidad de mis principios.
¿Se siente la Katharine Graham panameña? Ella, dueña del Washington Post, fue una mujer muy respetada.
No. Mi posición en el periodismo fue una carambola, pero me siento periodista.
Un mea culpa.
El tiempo que le quité a mi familia.
¿Cuál es su secreto para mantenerse activa a los 91 años?
Mantenerme activa.
¿Qué opina de poner en el freezer a un funcionario que le falta el respeto a un periodista, por ejemplo?
Eso implica venganza, que aunque es una reacción humana, no es aceptable.
¿Qué le contestaría a Martinelli ante su aseveración de que los medios solo publican lo negativo?
Que está errado y no acepta sus errores. Martinelli acepta sus errores, pero solo los chiquititos. Además, el periodismo es la conciencia de la democracia.
¿Cómo se explica que, en su día, periodistas que protestaron contra el gobierno por sus ataques a la libertad de expresión vayan a una fiesta ofrecida por el gobierno?
Da la impresión de que no respetan sus principios. Eso debilita la lucha por la libertad de expresión.
Tras la invasión, ¿en qué momentos la libertad de expresión ha peligrado?
Los gobiernos siempre resienten la libre expresión, porque les hace públicos sus errores, pero nunca habíamos llegado al grado en el que estamos actualmente.
El peor funcionario de este gobierno.
Martinelli, por el mal ejemplo que da a los demás. En la lista de los peores también está Guiseppe Bonissi, el Gabinete en general, por su sumisión y, aunque oficialmente no está en el gobierno, Gustavo García de Paredes.
Describa a Ernesto Pérez Balladares.
Lo daña su soberbia.
A Mireya Moscoso.
Sagaz.
A Martín Torrijos.
Cómodo.
A Martinelli.
¿Quieres que me cierren Panamá América otra vez?