Cinco días después de haber viajado a Cuba sin haberlo anunciado, el presidente, Ricardo Martinelli, salió ayer a explicar los detalles de esa gira.
Según el mandatario, el viaje fue “estrictamente personal” y estuvo acompañado de su esposa, Marta Linares y sus tres hijos.
“Es el primer viaje familiar luego de tres o cuatro años de campaña política. Viajé con mis propios recursos”, agregó.
Martinelli admitió que sostuvo una reunión privada con el jefe de Estado de Cuba, Raúl Castro, divulgada el pasado sábado por los medios de comunicación del Gobierno cubano.
Explicó que sus hijos estuvieron presentes en el encuentro y tuvieron la oportunidad de preguntarle a Castro sobre diversos temas, como la historia de la isla.
Incluso, agregó, hablaron de temas bilaterales. Sin embargo, Martinelli no dio más detalles de la conversación.
“Han querido hacer de algo tan insignificante algo grande”, respondió Martinelli, luego de las versiones de que habría viajado a la isla para solucionar una supuesta crisis diplomática por la posición de Panamá ante el bloqueo económico estadounidense a la isla.
“Todo eso es falso”, reiteró. Las palabras de Martinelli se dieron durante la toma de posesión del nuevo director del Cuerpo de Bomberos de Panamá, Pablo Tuñón.
Junto a Tuñón estuvo el subdirector, Rodrigo Baruco. A ambos le impusieron el rango de coronel y le entregaron la “bocina de mando”, durante un acto realizado en el Salón Amarillo del Palacio de las Garzas.
“No sé cómo comenzar, pero agradezco a todos (...) es un cargo importante el que asumo, luego de 41 años de laborar dentro de los bomberos”, comentó Tuñón durante su discurso.
En el acto también estuvieron los distintos directores de cuerpos de bomberos de las provincias.
También presenciaron la distinción el vicepresidente y canciller, Juan Carlos Varela y la ministra de Gobierno, Roxana Méndez.
A principios del año, la Asamblea aprobó un proyecto de ley que reorganizó los bomberos.
