Panamá pareciera estar destinado a ser un punto clave en la geopolítica latinoamericana. Pese al menoscabo a su histórica política exterior en los últimos años, la situación de varios de los protagonistas de la VII Cumbre de las Américas, a realizarse en el país en abril próximo, podría revitalizar el papel del istmo y del propio encuentro regional.
Sin duda alguna, el principal atractivo de esta edición de la cumbre es la asistencia conjunta de Estados Unidos y Cuba, los dos extremos políticos e ideológicos del continente. Hace unas semanas, sin embargo, sus líderes anunciaron la implementación de mesas de diálogos para reestablecer sus relaciones políticas, económicas y diplomáticas.
Como muestra de su disposición, ambas naciones liberaron presos políticos para ser devueltos a Estados Unidos y Cuba, respectivamente. “Todos somos americanos”, dijo incluso el presidente estadounidense Barack Obama en un español rústico durante una conferencia por internet desde la Casa Blanca.
Sin embargo, la región atraviesa por otras complicadas situaciones políticas que se conjugarán en Panamá.
Por ejemplo, la presidenta argentina, Cristina Fernández, llegará al istmo en plena crisis institucional tras la misteriosa muerte del fiscal Alberto Nisman.
Unas horas antes de comparecer ante el congreso argentino para exponer un supuesto encubrimiento de Fernández a empresarios iraníes en un atentado terrorista, Nisman apareció con un disparo en la cabeza.
Autoridades argentinas sostienen que todo indica que fue un suicidio. La oposición, en cambio, asegura que Nisman fue asesinado para proteger la administración de Fernández.
ALIADO OLVIDADO
Durante años, el presidente venezolano Hugo Chávez encontró en la Cuba de los Castro a su mayor aliado político, económico y social. Ante su muerte, su reemplazo, Nicolás Maduro, se apoyó en la isla caribeña para evitar el desgaste de su régimen.
Con los diálogos entre Cuba y Estados Unidos, el gobierno venezolano pareciera perder a un aliado y entra en una nueva etapa, más aún con la profundización de la crisis económica en este país.
La continua escasez de alimentos y la disminución en el precio del petróleo -principal fuente de dinero de Venezuela- ocasionaron que durante un discurso público, Maduro encomendara el futuro de su país a aspectos religiosos. “Dios proveerá”, expresó el mandatario.
La visita de Maduro también podría generar protestas, ya que Panamá es uno de los destinos preferidos por los venezolanos que escaparon a su gestión.
LOS DESAPARECIDOS
A finales de septiembre, 43 estudiantes desaparecieron en Iguala, en el estado mexicano de Guerrero. Según reportes periodísticos, y testimonios de implicados, fueron asesinados por sus repetitivas protestas contra el narcotráfico rampante en esta zona del país.
Este hecho motivó numerosas manifestaciones en todo México, ya que el asesinato de estos jóvenes indicaba la complicidad de varias autoridades del país.
Enrique Peña Nieto, presidente mexicano, resistió casi que en silencio absoluto los enviones de la opinión pública. A cuatro meses de los crímenes, aún no se han capturado a los responsables intelectuales de la masacre.
Si bien desde septiembre Peña Nieto ha participado en varios foros -en su mayoría económicos-, esta es la primera vez que se reunirá fuera de su país con los demás líderes del área, varios de los que se pronunciaron sobre los desaparecidos.
EL NUEVO CANALERO
Desde hace unos meses, una empresa china comenzó a construir un canal en Nicaragua, el primer intento real de competencia con la obra insignia de Panamá.
El canal por Nicaragua
El presidente pinolero, Daniel Ortega, ha sido un ferviente defensor de la obra, y asegura que la misma significará el comienzo de una nueva era en la economía y la política de su país.
La visita de Ortega coincide con uno de los momentos más importantes en las obras de ampliación del Canal de Panamá. El consorcio Grupo Unidos por el Canal, que lleva a cabo la ampliación, mantiene reiteradas confrontaciones económicas con la Autoridad del Canal de Panamá.
Algunas de ellas, incluso, han tenido que ser resueltas mediante juzgados internacionales.
El proyecto de ampliación también presenta un retraso notable. Pese a que debería estar listo el año pasado, se prevee que se termine en 2016.
PAPEL DE PANAMÁ
A lo interno, el Ministerio de Relaciones Exteriores le puso el acelerador a los equipos que trabajan en el tejemaneje del foro. Desde los que participan en temas técnicos, hasta los que están involucrados con la logística.
“Prosperidad con equidad”, es el lema en el que se enfocarán los países participantes, y tema que propuso Panamá, como anfitrión. La canciller Isabel de Saint Malo, aseguró que en materia técnica ya existe el documento base de mandatos para la acción de la cumbre, y el mismo ya fue presentado en la Organización de los Estados Americanos (OEA).
“Ha tenido [el documento] una acogida favorable”, manifestó. De Saint Malo, quien en septiembre pasado asistió personalmente a La Habana para invitar a Castro, contó que el Grupo de Revisión de la Implementación de Cumbres (GRIC), se ha estado reuniendo en Washington desde agosto de 2014 para ver el tema de Panamá.
También participará el coreano Ban Ki Moon, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, quien confirmó su asistencia a De Saint Malo y al presidente, Juan Carlos Varela, durante el Foro Económico Mundial que se realizó en Davos, Suiza.
“Ese grupo ya conoce esta propuesta de mandatos para la acción, ya conoce el tema”, asegura. La propuesta de Panamá de acuerdo a la Cancillería pretende que los mandatarios de la región reflexionen sobre las dificultades que enfrentan los pueblos del hemisferio, así como las cualidades que les caracterizan. En otras palabras, a que una vez más se ponga sobre la mesa el debate sobre la desigualdad.
El Grupo de Revisión e Implementación de Cumbres (GRIC) se reunió en Panamá el viernes pasado para analizar estas directrices. El vicecanciller, Luis Miguel Hincapié, afirmó que el encuentro fue exitoso, y que se volverán a reunir a finales de febrero para continuar evaluando los temas a discutir en el encuentro.
Culmina con éxito reunión del Grupo de Revisión de la Implementación de Cumbres pic.twitter.com/Q7EI7V6JxS
OTROS ENCUENTROS
Los reflectores no solo estarán sobre Obama y Castro, y el resto de los países. Durante los días de la cita se desarrollarán eventos paralelos que pondrán al país en el centro del escenario americano.
Se realizarán el foro de juventudes, un foro de sociedad civil, otro de empresarios, y el foro académico, donde se tiene estimado reunir a unos 300 rectores de universidades del continente. El foro de empresarios, por ejemplo, es uno de los más esperados. El que se celebró en Cartagena hace dos años reunió a 700 empresarios. Estuvieron Diego Hernández, entonces presidente de la chilena Codelco, la productora más grande de cobre del mundo; el multimillonario venezolano Gustavo Cisneros; Marcelo Odebrecht, de la constructora brasilera Odebrecht Enghenaria; Emilio Azcárraga, presidente de la mexicana Televisa; e Indira Nooyi, presidenta de Pepsico.
La canciller asegura que el encuentro costará $15 millones, suma que considera poca para lo que, afirma, el país recibirá. Lo sustenta de esta manera: cada mandatario llegará con su equipo de ministros, personal de seguridad, y en algunos casos con equipo de prensa y protocolo. De hecho, se espera que se acrediten unos 2 mil periodistas de diferentes lugares del mundo.
En 2012, la cumbre de Cartagena, una ciudad histórica que por esos días escondió a los indigentes, encerró a los perros callejeros y prohibió a los vendedores ambulantes portar objetos grandes, costó $35.3 millones y fue criticada por los excesos en un país donde una buena parte de sus ciudadanos gana el salario mínimo. Por ejemplo, el gobierno colombiano invirtió en la confección de mil 500 guayaberas a $250 dólares cada una, para repartirlas entre algunos asistentes, pagó miles de placas conmemorativas para los carros oficiales, puso 39 kilómetros de cableado óptico en la ciudad, entre otros lujos.
Algunos de los gastos por la organización en Panamá son: $3.5 millones para adecuar el Centro de Convenciones Atlapa, $400 mil para contratar una agencia de publicidad, $20 mil para una empresa que provea cargadores de celular, $46 mil por hospedaje y alimentación, y $134 mil por el alquiler del Museo de la Biodiversidad, para una cena de gala.
Isabel De Saint Malo
Canciller de Panamá
“Los aspectos de logística avanzan favorablemente, hicimos un esfuerzo por adelantar la gran mayoría de las licitaciones cumpliendo con los procesos de transparencia. Estamos esperando las decisiones de las comisiones evaluadoras”, adelantó la canciller.
Ya los mandatarios de estos países han confirmado su presencia: Chile, Argentina, Colombia, Cuba, México, Estados Unidos, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Paraguay, Venezuela, Brasil y Nicaragua. La delegación de EU será la más numerosas.
De acuerdo a fuentes del gobierno de esa nación, el grupo estadounidense estaría compuesto por una mil 200 personas. Para tener una idea, en la cumbre de Cartagena parte de esta delegación utilizó toda la infraestructura del hotel Hilton, con sus 341 habitaciones. Fuentes oficiales dijeron a este medio que una avanzada del servicio secreto de EU, el cuerpo élite que cuida al mandatario estadounidense, y que protagonizó un escándalo relacionado con sexo y prostitutas en Colombia hace dos años, está en Panamá desde hace siete meses verificando aspectos de seguridad.