El año escolar comenzó en algunos puntos del interior del país de forma irregular ante la falta de docentes y de escuelas en buen estado.
En la comarca Ngäbe Buglé las protestas de los indígenas causaron que más de 400 educadores no lograran llegar a tiempo a los centros educativos de esa área, informó el director provincial de Chiriquí, Gertrudis Rodríguez.
Agregó que los alumnos de las escuelas Quebrada de Loro, San Bartolo y Hato Pilón recibirán clases en albergues, ya que no han terminado de rehabilitarlas.
Mientras que en Guabito, Bocas del Toro, mil 100 alumnos del colegio del mismo nombre no asisten a clases porque la empresa encargada de los trabajos de ampliación no ha terminado los trabajos de pintura, electricidad y la reparación del cielo raso, se quejaron los padres de familia.
Elena Paredes, una de las acudientes, explicó que hace cuatro años que afrontan el mismo problema, por lo que han tomado la decisión de no enviar a sus hijos al plantel hasta que el Ministerio de Educación busque la manera de que la empresa cumpla con el contrato.
En tanto, el alcalde del área comarcal de Kankintú, Leonardo Machuca, dijo que en esta área hay escuelas-rancho donde los niños tienen que dar clases en el piso, porque no hay sillas.
En Colón, más de 62 mil estudiantes empiezan hoy el año escolar, debido a que ayer era el aniversario del distrito cabecera.
El director regional de Educación, Ludolfo Herrera, expresó que en las escuelas de Viento Frío, Cuango y María Chiquita, afectadas por las lluvias de diciembre, ya se trabaja en su reparación.
En Darién, el Instituto Profesional y Técnico Marcos Alarcón comenzará clases el 10 de marzo, porque las rehabilitaciones están atrasadas, dijo la directora Mirtha Ortega.
En Pesé, Herrera, en el colegio José Octavio Huerta, al que acuden 960 estudiantes, no empezarán clases hasta que el Ministerio de Salud dé el visto bueno de que está libre de contaminantes, los cuales en septiembre de 2010 afectaron a alumnos y educadores.
Docentes del colegio Pedro Pablo Sánchez, en La Chorrera, indicaron que hay aulas sin electricidad. En tanto, en Veraguas, la escuela de La Raya de Santamaría en Santiago y el Instituto Agro Forestal de Calobre no están reparados en su totalidad, lo que afecta a 900 alumnos.
(Con datos de Sandra Rivera, Amada Racero, Isabel Castro, Vielka Corro, Víctor Rodríguez y Eric Montenegro)