El mecanismo financiero mediante el que Lucky Games S.A. enviaba fondos a la sociedad Shelf Holding Inc., que maneja el ex presidente Ernesto Pérez Balladares, generó duros cruces entre antiguos altos ejecutivos del desaparecido Primer Banco del Istmo (Banistmo) y la oficial encargada de autorizar y realizar la operación.
Lucky Games S.A. no emitía los cheques directamente a nombre de Shelf Holding Inc., sino que la empresa de juegos confeccionaba cheques –por cifras casi exactas durante varios meses– a nombre de Banistmo, y luego el banco los endosaba y los depositaba en la cuenta que tenía Shelf Holding Inc. en el mismo banco.
Esa práctica, para cinco banqueros consultados que pidieron no ser identificados, interrumpía la verdadera “ruta del dinero” y ocultaba los orígenes de los fondos. El procedimiento, según registros bancarios, lo autorizó y realizó la entonces oficial de Banistmo Marta Arango.
“Esos eran cheques emitidos a nombre de Banistmo que debieron ser depositados en las cuentas del banco. No hay ningún nivel ejecutivo que pueda aprobar que cheques emitidos al banco sean depositados a nombre de un tercero”, dijo ayer el ex gerente general de Banistmo Juan Carlos Fábrega. “Los procedimientos prohíben ese tipo de transacciones a todos los niveles”, agregó.
Para Fábrega, la oficial del banco que hizo el “doble endoso” violó los procedimientos y normas bancarias de Banistmo y descartó, además, que haya tenido autorización de sus superiores para hacerlo. “Actuó por la libre”, amplió.
Sin embargo, Arango envió ayer un comunicado en el que afirmó que sus “gestiones fueron siempre del consentimiento de sus superiores jerárquicos”. “Durante mi desempeño como funcionaria de este banco (Banistmo), nunca recibí ningún llamado de atención que indicara que actuaba al margen de los procedimientos establecidos” , añadió.
La triangulación de dinero de Lucky Games S.A. a Shelf Holding Inc. está en la mira del Ministerio Público desde septiembre pasado, cuando se abrió una investigación a la sociedad que controla el ex mandatario, por supuesto blanqueo de capitales.
VEA ‘El procedimiento estaba prohibido por las normas’