Los trabajos que realiza el Ejecutivo en la Villa Diplomática, en Quarry Heights, no son bien vistos por la Alianza Pro Ciudad.
Jorge Riba, presidente del gremio, dijo que es un “irrespeto” a la ciudadanía y recordó al presidente de la República, Ricardo Martinelli, que debe cumplir con la ley.
El concepto de ciudad jardín es una herencia arquitectónica a la que, al parecer, no le dan la importancia que se merece, dijo.
Las labores de rehabilitación y ampliación de la Villa Diplomática que realiza el Ejecutivo empezaron con la construcción de una piscina, luego con una oficina de reuniones y una cerca perimetral. Y es esta última obra la que cuestiona la Asociación de Residentes de Quarry Heights, porque contraviene la Resolución No. 139-2000 del 8 de agosto de 2000, que estableció normas especiales para mantener el carácter de ciudad jardín en la región interoceánica.
El muro que construye el Ejecutivo es de seis metros de altura, cuando la norma establece como máximo 1.50 metro.
Riba dijo que en la pasada administración se aprobaron cambios de zonificación que afectaron el concepto de ciudad jardín y, ahora, al parecer, se seguirán violando las normas. Además, se mostró en desacuerdo con la estructura de cemento, porque la Villa es de madera.
