Los magistrados del Tribunal de Cuentas ordenaron por unanimidad el cierre y archivo de las investigaciones por supuesto enriquecimiento injustificado contra el ex contralor Alvin Weeden y su esposa Malvina.
Los magistrados Álvaro Visuetti (ponente), Ileana Turner y Oscar Vargas determinaron que Weeden tenía la suficiente holgura financiera para justificar la adquisición de sus bienes y demás gastos.
Los dos sucesores de Weeden en la Contraloría Carlos Vallarino y la actual Gioconda de Bianchini recomendaron el archivo de las sumarias, posición que finalmente avaló el Tribunal de Cuentas.
La denuncia fue presentada el 14 de noviembre de 2006 por la firma Infante & Pérez Almillano, en representación del ex presidente Ernesto Pérez Balladares.
Las acusaciones del ex mandatario se basaron en la adquisición de un número plural de bienes de alto valor económico durante el periodo 2000-2005, cuando Weeden fue contralor. Según la denuncia de Pérez Balladares, estos bienes (entre los que hay tres vehículos, varios terrenos, una finca y acciones) tenían un valor de 1.1 millón de dólares.
Weeden opinó que el fallo del Tribunal de Cuentas deja en evidencia la falsedad de los cargos que le ha endilgado Pérez Balladares.
“Vamos a tomar acciones civiles contra Pérez Balladares. Presentaremos una demanda millonaria”, anunció el ex contralor.
Weeden y Pérez Balladares tienen una enconada disputa, dentro y fuera de los tribunales. Se han demandado mutuamente por calumnia e injuria, y a principios de mes, el ex contralor demandó civilmente al ex presidente por 5 millones de dólares.
Gustavo Pereira, de Infante & Pérez Almillano, dijo que no son parte del proceso, ya que se limitaron a presentar la denuncia. “Esto es algo entre el Tribunal de Cuenta y Weeden”, enfatizó.