El Ministerio de Obras Públicas (MOP) tiene una meta específica. Entregar el millonario proyecto cinta costera y nueva vialidad en abril de 2009, justamente un mes antes de las elecciones presidenciales.
Por eso contra viento y marea, la primera piedra de la obra que implica el relleno de 25 hectáreas de mar, la creación de 26 hectáreas de parque y una nueva vía a cuatro carriles, se pondrá el martes 30 de octubre. Al menos eso fue lo que explicó ayer el director de la oficina de proyectos especiales del MOP, Carlos Ho González.
"Empezaremos con las actividades previas que no necesitan el estudio, por ejemplo, la instalación de los campamentos centrales", aseguró.
Pese a que el Decreto Ejecutivo 209 de septiembre de 2006 que rige los procesos administrativos para los estudios de impacto ambiental (EIA) establece hasta 85 días hábiles para la aprobación del proyecto, el MOP espera que el documento sea aprobado en seis semanas.
Pero el hecho de que un proyecto de la magnitud de la cinta costera, cuyo EIA es de categoría III (de gran afectación ambiental), aún no tenga la aprobación de la Autoridad Nacional del Ambiente (Anam), preocupa a los ambientalistas.
Susana Serracín, miembro de la Asociación de Derecho Ambiental, asegura que la falta del estudio se presta para crear situaciones que rayan en el delito ambiental porque no se cumple con las normas.
"La esencia del derecho ambiental es prevenir y construir obras armónicas que sean proporcionadas con el espacio, no crear junglas de concreto que están matando la belleza de la ciudad", explica.