Trujillo aseguró que tenía contacto directo con Traad

Trujillo aseguró que tenía contacto directo con Traad


Tras un breve intercambio de palabras, Trujillo fue directo al meollo del asunto y, supuestamente, le ofreció al ex fiscal auxiliar 150 mil dólares para que el Ministerio Público colaborara con el proceso contra Ricardo Traad Porras.

“Yo mantengo contacto directo con Traad, hay garantías del dinero”, le dijo Trujillo a Jaén, durante la reunión que se concretó en la oficina de la Fiscalía Auxiliar en Ancón.

Así lo afirmaron dos altas fuentes del Ministerio Público a este diario. También se consultó a funcionarios del Ejecutivo.

No había nadie más en la reunión. Según las fuentes, Trujillo no alcanzó a dar detalles de cómo se repartiría el dinero.

La supuesta coima que ofreció Trujillo, ex asistente ejecutivo de la Dirección Institucional de Asuntos de Seguridad Pública del Ministerio de Seguridad, con un salario de 2 mil 500 dólares, tenía como objetivo que el fiscal primero de Drogas, Javier Caraballo, colaborara con el caso Traad.

Según las fuentes consultadas, Trujillo le pidió a Jaén que intercediera ante Caraballo y le transmitiera el mensaje del dinero disponible: 150 mil dólares.

Caraballo apeló en febrero pasado la decisión del Juzgado Cuarto Penal, que el 29 de enero pasado absolvió a Traad del delito de blanqueo de capitales y narcotráfico, ordenando su libertad. El fallo lo firmó la juez suplente Esther Hinestroza (ver recuadro).

Las fuentes consultadas del Ministerio Público dijeron que Jaén rechazó el ofrecimiento y redactó un informe sobre la reunión al procurador, Giuseppe Bonissi, en ese momento de visita oficial a Taiwan.

Unos días después, Jaén pidió la conducción de Trujillo. Para cumplir con la orden, se presentó el jueves pasado en el Ministerio de Seguridad para buscar y conducir al ex miembro de las Fuerzas de Defensa.

Una vez allí, se reunió con el viceministro de Seguridad, Alejandro Garúz.

En ese momento, Garúz llamó a Trujillo, quien se sumó a la reunión entre el viceministro y el entonces fiscal auxiliar. “Garúz le pidió ahí mismo la renuncia a Trujillo; este la redactó y se le aceptó de inmediato”, explicó una fuente cercana al encuentro. Según esa fuente, al renunciar Trujillo, el Ministerio Público reconsideró la decisión y resolvió de común acuerdo con el viceministro de Seguridad no conducir a Trujillo.

“Lo que queríamos era evitarle un segundo escándalo a Mulino”, dijeron desde el Ministerio Público, al referirse a la primera polémica que involucró a Mulino con su asesor Eduardo Rumba Alfaro, que renunció al puesto tras conocerse que se reunió con presos de alto perfil en la cárcel La Joya.

Pero la institución que maneja Bonissi cambió de parecer sobre la marcha, y pidió finalmente la conducción de Trujillo, el pasado martes por la tarde, para que responda por un expediente abierto por supuesto delito contra la administración pública. O sea, cuatro días después de que Jaén informó al Ejecutivo sobre el ofrecimiento de la supuesta coima.

En ese ínterin se conoció el traslado de Jaén desde la Fiscalía Auxiliar al cargo de asesor de Bonissi. El Procurador encargado descartó que el cambio esté relacionado con la reunión entre Trujillo y Jaén. “No tiene nada que ver; Jaén es una persona de mi absoluta confianza”, dijo ayer Bonissi.

Mulino, por su parte, salió ayer a aclarar su vínculo con Trujillo, quien trabajó en el plan de seguridad de la Alianza por el Cambio, la campaña que llevó al poder a Ricardo Martinelli.

“Trujillo no era asesor personal mío. Él trabaja en la Dirección Institucional de Asuntos de Seguridad Pública, bien lejos de mi despacho”, dijo Mulino.

El ministro agregó que recibió un llamado de Jaén la semana pasada, mientras se encontraba en Darién, en la que le informó de una situación irregular que involucraba a Trujillo. “Por instrucciones mías y del Procurador le dije: el que delinque va preso, y si usted tiene todas las evidencias de que esta persona faltó a la ley y cometió un delito, por mí se lo puede llevar preso ya. No estoy aquí para apadrinar sinvergüenzuras de nadie”, narró.

El ministro detalló que, efectivamente, el Ejecutivo le pidió la renuncia a Trujillo la semana pasada, aunque no aclaró el contenido del encuentro entre el militar, Jaén y su segundo, el viceministro Garúz. Tampoco por qué se resolvió cancelar la conducción de Trujillo el jueves pasado.

Según fuentes oficiales, la orden de conducción emitida el jueves pasado se suspendió porque Trujillo renunció a su cargo, por lo que había que reordenar el expediente.

Entre el jueves pasado y el martes último, día en que se condujo finalmente a Trujillo, se conocieron declaraciones de Martinelli. Durante una entrevista con este diario, publicada el martes pasado, el Presidente reveló: “En estos días aquí hubo un funcionario del gobierno que cometió un delito, yo pedí que le pusieran la denuncia para que le cayera todo el paso de la ley, pero aquí desafortunadamente la gente se pone de acuerdo, renuncia, y pierde el sistema”. El jefe de Estado no identificó el nombre del asesor.

Horas después, el Ministerio Público dio marcha atrás y ordenó la conducción de Trujillo.

Este diario intentó comunicarse con Garúz y Jaén, pero ninguno de los dos contestó las llamadas. Tampoco Trujillo contestó las llamadas que se le hicieron. >>>

Casa por cárcel para Trujillo

El fiscal auxiliar Ángel Calderón concedió ayer una medida cautelar de casa por cárcel a favor de José Hilario Trujillo, mientras se le investiga por el supuesto delito contra la administración pública.

Trujillo fue conducido al Instituto de Medicina Legal para evaluar su problema de diabetes. De ahí se le trasladó a su casa en Las Cumbres.

El expediente será ahora remitido a la Fiscalía Primera Anticorrupción.

Calderón informó que la única “evidencia” hasta ahora es el informe que presentó Neftalí Jaén, fiscal auxiliar hasta el lunes pasado y actual asesor del procurador encargado, Giuseppe Bonissi.

Jaén negó que su salida del cargo de fiscal tuviera relación con lo ocurrido a Trujillo.

Los dos ­Jaén y Calderón­ denunciaron amenazas telefónicas, y que tuvieron que ser mudados de sus casas.

En la residencia de Calderón, en Condado del Rey, alguien escribió en la pared: “Familia de abogados, ladrones y estafadores”.

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