Representantes de las alianzas que paralizaron el país en julio pasado en demanda por mejoras en el costo de la vida se reunieron este fin de semana para afinar sus estrategias de cara al inicio de la segunda fase del llamado diálogo Por Panamá que arranca esta semana.
Por ejemplo, la Alianza Nacional de los Derechos del Pueblo Organizado (Anadepo) ya decidió quiénes serán los ocho representantes (principales y suplentes) que estarán en la mesa del diálogo el próximo 6 de octubre, en la Universidad Tecnológica de Panamá.
Además, acordaron realizar un encuentro nacional de diferentes organizaciones el día 23 de octubre en la ciudad de David, provincia de Chiriquí. Allí, contó el docente Armando Espinosa, discutirán tema puntuales como la situación económica del país y la Caja del Seguro Social. “Se tomarán decisiones importantes con más de 200 dirigentes para establecer nuevas medidas de presión que hagan entender a los gobernantes y grupos poderosos económicos que Panamá es de todos los panameños y hay que legislar y gobernar para los más vulnerables del país”.
Espinosa, quien fue uno de los representantes de Anadepo más beligerante en la primera fase del diálogo, que se realizó del 21 de julio al 17 de septiembre, en el centro Cristo Sembrador, en Penonomé, provincia de Coclé, indicó que Anadepo “está preparada para dialogar con el gobierno y el sector privado al más alto nivel”.
De hecho ayer domingo Espinosa indicó que el sector empresarial “no puede seguir dando excusas para evadir su participación en la segunda etapa del diálogo. Las excusas solo sirven para continuar con el atropello económico al pueblo panameño. Las alianzas estamos listas para el debate”.
El pasado 19 de septiembre, la Gran Alianza Por Panamá que aglutina a 150 agrupaciones advirtió que solicitará revisar todo lo actuado en la fase 1 del diálogo, que transcurrió en julio, agosto y parte del mes de septiembre. Y es que, en dicha mesa solo participaron representantes del Ejecutivo y de tres grupos sociales, los cuales paralizaron el país con protestas y cierre de calles en julio pasado.
Aparte de Anadepo también formaron parte de la primera fase del diálogo la Alianza Pueblo Unido por la Vida, que aglutina a dirigentes sindicales, docentes, médicos, entre otros, y el Bastión del Oriente Chiricano Comarca Ngäbe Buglé y Campesinos.
Para esta nueva fase se contempla la participación de una serie de organizaciones ciudadanas y empresariales. También en esta etapa se propuso la discusión de ejes temáticos, tales como: seguridad y soberanía alimentaria, derechos humanos, ambiente y pueblos originarios. En la última reunión del diálogo, celebrada en Coclé, se estableció que la metodología y el mediador o facilitador sería elegido en este primer encuentro, mientras que la Iglesia católica tendrá un papel de observador y todos los participantes tendrán igualdad de condiciones con derecho a voz y voto.