El abogado Miguel Antonio Bernal envió una carta al rector de la Universidad de Panamá (UP), Eduardo Flores Castro, en la que exige el cumplimiento de sus responsabilidades como máxima autoridad y representante legal de la institución en relación con el proceso constituyente originario.
En la misiva, Bernal recordó que el 21 de julio de 2021, durante la Reunión N°5-21 del Consejo Académico, presidida por Flores, se aprobó sin objeciones la Declaración sobre el Cambio Constitucional y el Proceso Constituyente, presentada por la Comisión Universitaria de Agenda Nacional.
Dicho documento reconocía que “la Nación panameña se encuentra de hecho transitando por un proceso constituyente, ya que la actual coyuntura política ha puesto en el centro del debate la necesidad impostergable de transformar las instituciones republicanas”. Además, planteaba que la adopción de una nueva Constitución debía darse mediante la convocatoria de una Asamblea Constituyente Originaria.
Adjuntos
Nota SEPRESAC.pdfBernal subrayó que la aprobación de esta declaración representó un mandato ciudadano para las autoridades universitarias, pero que, tras casi cinco años, la Universidad de Panamá ha guardado silencio y no ha cumplido cabalmente con su compromiso.
El también asesor presidencial para Asuntos Constitucionales y coordinador ejecutivo de la Secretaría Presidencial para la Reorganización del Estado y Asuntos Constitucionales (SEPRESAC), advirtió en su carta, fechada el 14 de marzo de 2025, que, aunque se ha iniciado un proceso de alfabetización constitucional, las aulas universitarias –excepto la Facultad de Ciencias de la Educación– han permanecido ajenas a la ejecución de dicho acuerdo.
Bernal acusó al rector de incurrir en una “conducta omisiva” que, según el artículo 334 del Estatuto Universitario, podría constituir una falta disciplinaria al implicar el incumplimiento de un deber funcional. Por ello, instó a Flores a ejercer las responsabilidades inherentes a su cargo.
La respuesta del rector
Seis días después, Flores respondió a Bernal, enfatizando que el actual gobierno ha puesto en marcha un proceso constituyente y que el propio Bernal fue designado para liderarlo.
La Universidad de Panamá apoya y colabora, pero no puede “arrogarse atribuciones” que le corresponden al Ejecutivo, a través del asesor presidencial para Asuntos Constitucionales y coordinador ejecutivo de SEPRESAC, sostuvo el rector.
Asimismo, Flores cuestionó la legitimidad de la exigencia de Bernal, argumentando que, al provenir de un funcionario del Ejecutivo, podría interpretarse como una intromisión en la autonomía universitaria, consagrada en la Constitución, la Ley 24 de 14 de julio de 2005, el Estatuto Orgánico y los reglamentos de la institución.
Finalmente, reiteró que la Universidad de Panamá está al servicio del país y que ha organizado actividades académicas sobre el proceso constituyente originario. Agregó que la institución está dispuesta a contribuir, dentro de su ámbito de competencias, al estudio y solución de los problemas nacionales.