Considerar el contrato con Minera Panamá y retomar la discusión del proyecto de extinción de dominio están entre las prioridades del diputado Jaime Vargas, el candidato del Partido Revolucionario Democrático (PRD) para dirigir la Asamblea Nacional en la primera legislatura del quinto y último período de sesiones ordinarias que arranca el próximo 1 de julio.
Vargas fue designado el pasado jueves por la mayoría (23) de los 35 diputados que conforman la bancada oficialista del PRD para presidir el Legislativo. Ese día también se eligió al perredista Ricardo Torres, como candidato para la primera vicepresidencia de ese órgano del Estado.
Ambos temas son iniciativas del Ejecutivo. El contrato de Minera Panamá con el Estado estuvo bajo escrutinio ciudadano, desde marzo pasado hasta el 22 de abril. Ahora, el documento está en manos del Ministerio de Comercio, que espera que arranquen las sesiones ordinarias del Legislativo para presentar la propuesta. Este contrato debe ser discutido, en primera instancia, en la Comisión de Comercio de la Asamblea Nacional y luego por el pleno Legislativo.
El proyecto de extinción de dominio, presentado por el Ejecutivo en abril de 2021, no logró consenso en Legislativo, presidido por el perredista Crispiano Adames.
”Tenemos un compromiso con el Presidente de pasar la ley de extinción de dominio con las modificaciones que se necesitan. Créanme que le vamos a dar prioridad, porque nosotros estamos en un año preelectoral y necesitamos darle las soluciones a este pueblo que tanto lo necesita”, dijo la apuesta del PRD para presidir la Asamblea.
No obstante, el diputado Vargas, quien durante su paso por la Asamblea solo ha firmado 18 iniciativas legislativas respaldando las propuestas de sus compañeros, pasó por alto otros temas que el Legislativo tiene pendientes y que han estado en la agenda sin éxito. Entre ellos, proyectos anticorrupción y la modificación al Reglamento Interno de la Asamblea.
Los diputados de la Comisión de Credenciales, a cargo del diputado Leandro Ávila, en septiembre de 2021, aprobaron en primer debate el reglamento de la Asamblea. Sin embargo, varias de las modificaciones introducidas no fueron del agrado de la mayoría de sus colegas.
Entre ellos, que se eliminaron las licencias por hasta 60 días para diputados y el descuento de salario para aquellos que se ausenten sin haber solicitado una licencia por maternidad, enfermedad o gira oficial.
De no avalarse la modificación del reglamento de la Asamblea, que está en el punto 35 de agenda del pleno, en esta última legislatura, sería una propuesta incumplida del actual presidente del Legislativo, el perredista Crispiano Adames. Cabe señalar que esta promesa también quedó en el aire, en la gestión del perredista Marcos Castillero, así como en la de Adames, que ha dirigido la Asamblea por dos períodos consecutivos.
Pero, ¿qué denota esta posición de Vargas en palabras de ciudadanos y analistas políticos? Para el analista José Stoute las palabras de Vargas demuestran la “prisa exagerada” que tiene el Gobierno de aprobar el contrato minero, entre otras razones, porque “este nefasto proyecto de contrato está ganando cada día más sectores que lo rechazan”.
Por otro lado, dijo que el Gobierno necesita apoyar el contrato porque públicamente se ha comprometido destinar parte de los fondos al programa de pensiones de la Caja de Seguro Social, que enfrenta una crisis.
Con respecto a la extinción de dominio indicó que los diputados ya demostraron que no están dispuestos a aprobar una ley que enfrente el problema de los ingresos ilegales de pandilleros y producto de la corrupción. “Es verdad que pueden aprobar la ley, pero va a hacer una ley torcida con muchos escapes y muchas limitaciones para poder investigar, incluso a los diputados”, dijo.
Aseguró que dejan por fuera la discusión del Reglamento Interno para mantener la misma estructura y capacidad para evadir las responsabilidades que tiene la Asamblea Nacional.
En tanto, Candy Chen, de la Fundación Conciencia Ciudadana, señaló que quedaron tantos proyectos de gran importancia social por debatirse, que es una “pena que no se haya podido reformular el Reglamento Interno de la Asamblea para precisamente contrarrestar la selectividad de proyectos por parte de los diputados”.
Explicó que es difícil y triste que se tengan que presentar una, dos o tres veces iniciativas porque no fueron analizadas en las distintas comisiones legislativas.
Tanto Vargas, como Torres requieren el voto de 36 diputados para poder dirigir la Asamblea. El PRD también tiene los votos del Movimiento Liberal Republicano Nacionalista (Molirena), su aliado.