Críticas a Ricardo Martinelli y Zulay Rodríguez; el expresidente recula

Críticas a Ricardo Martinelli y Zulay Rodríguez; el expresidente recula
Para los comicios de 2024, solo se convertirán en candidatos las tres figuras que más firmas presenten al TE (y que superen la cantidad mínima requerida por ley), en cualquiera de los cargos de elección popular


De “juega vivo” son catalogados los dirigentes de partidos políticos que aspiran a los diferentes cargos de elección popular por la vía independiente.

+info

Ricardo Martinelli desiste de postularse como precandidato presidencial por libre postulación

Así lo han planteado precandidatos que buscan ser candidatos por esta vía, luego de conocer que el expresidente Ricardo Martinelli, que fundó el partido Realizando Metas, y la diputada perredista Zulay Rodríguez, aspiran a candidaturas por la libre postulación para la silla presidencial, de cara al 2024.

Consideran que los dirigentes de partidos cuentan con una estructura partidaria que les permitirá lograr las firmas más rápido que otros.

Eduardo Quirós, precandidato a la presidencia por la vía independiente, indicó que la debilidad de las leyes electorales permite a un candidato aplicar el “juega vivo legalizado”.

Al cierre de esta edición, circuló una nota firmada por Martinelli en la que autoriza a Alma Cortés para que retire en el TE toda la documentación que aportó para ser reconocido como precandidato por la libre postulación.

Mañana domingo finaliza el proceso de postulación.

La estrategia

La estrategia de algunos dirigentes de partidos políticos tradicionales se enfoca en usar la plataforma de la libre postulación, rumbo a los comicios generales de 2024.

El partido Realizando Metas (RM) reformó el pasado domingo 24 de julio su estatuto para permitir, entre otras cosas, la postulación de candidatos independientes. Cuatro días después, su presidente y fundador, el exmandatario Ricardo Martinelli (2009-2014), oficializó su aspiración a una precandidatura a la silla presidencial bajo esa figura.

Esto, a juicio de otros precandidatos por la libre postulación, es un ejemplo, de las deficiencias del sistema electoral panameño, que desnaturaliza las verdaderas candidaturas independientes. Además, lo catalogan como un “juega vivo”.

Esto se da cuando faltan horas para que culmine, este domingo 31 de julio, el proceso de postulación para quienes deseen aspirar a cualquier cargo de elección popular por libre postulación. Por ahora, según datos del Tribunal Electoral (TE), 15 son los precandidatos por la libre postulación. Pero solo tres podrán optar al Palacio de las Garzas.

En 2019, las candidaturas por libre postulación fueron apoyadas por alrededor de 1.2 millones de ciudadanos, que incluso, llevaron a la Asamblea Nacional, por primera vez, a cinco diputados que pudieron formar una bancada independiente.

En esa elección, solo entre los candidatos independientes Ricardo Lombana y Ana Matilde Gómez hubo cerca de 500 mil votos de respaldo.

Sobre la pretensión de Martinelli, llama la atención que su postulación se dio después de reformar el estatuto de RM y tras la decisión de los magistrados del TE, Alfredo Juncá, Heriberto Araúz y Eduardo Valdés, que hace tres días confirmaron la suspensión del fuero electoral penal que amparaba al exgobernante; por tanto, deberá afrontar el caso Odebrecht, en el cual está imputado por presunto blanqueo.

Pero este no es el único caso en el que una figura de un partido político se postula como independiente. Un día antes que el exgobernante, lo hizo la perredista Zulay Rodríguez, quien enfrenta un escenario distinto al de Martinelli respecto a su partido. El estatuto del PRD prohíbe expresamente (en su artículo 196) que uno de sus miembros compita como candidato en otro partido o como independiente, si antes no ha participado en las elecciones primarias, a menos que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) lo autorice.

No solicitar permiso al CEN es causal de expulsión. Eso aplica, aunque el copartidario haya perdido en la elección interna. Al respecto, Rodríguez se limitó a decir que la ley electoral está por encima de los estatutos y que ya existen precedentes sobre este tema.

En los comicios pasados, el actual representante del corregimiento de Pedregal, en David, provincia de Chiriquí, el perredista Rito Barrett usó esta estrategia.

Barrett no participó en las primarias de su partido, pero sí se postuló como independiente.

Fuentes del TE informaron que hay otros aspirantes en la misma condición, pero para otros cargos de elección.

La actual norma electoral permite que los miembros de los partidos se postulen como independientes. Lo único que se lo impediría sería el estatuto de cada partido.

‘Juega vivo’

Hay quienes señalan que dirigentes con estructura partidaria van a lograr las firmas más rápido, lo que restaría oportunidad a los que no cuentan con ese respaldo.

Para Eduardo Quirós, actual precandidato a la presidencia de la República por la vía independiente, la intención de Martinelli y Rodríguez revela, una vez más, “el estado descompuesto de la política panameña”.

Quirós considera que la debilidad de las leyes electorales, aprobadas por una Asamblea “corrompida”, permiten a un candidato aplicar el “juega vivo legalizado”.

“La desesperación de los partidos políticos por desplazar las candidaturas verdaderamente independientes priva a los panameños de opciones reales”, destacó.

Otro que también se quejó por esta acción fue el también precandidato a la presidencia de la República, Francisco Paco Carreira, quien indicó que Martinelli y Rodríguez “de independientes no tienen nada”.

Ricardo Lombana, que fue candidato presidencial por la libre postulación en mayo de 2019, posteriormente decidió inscribir un partido político, que es el Movimiento Otro Camino.

Lombana expresó que era “ingenuo” pensar que para el 2024, los partidos iban a dejar el camino libre a los ciudadanos que quisieran aspirar de manera genuina, sin clientelismo, para la libre postulación.

“Si en 2019 fue caótico, en 2024 va a ser peor. Seguramente vamos a ver candidatos de partidos políticos, sobre todo los grandes, quienes van a utilizar su maquinaria y sus fondos y, sin renunciar a los partidos, van a inscribirse como precandidatos independientes”, planteó antes de que empezaran las postulaciones, en junio pasado.

El Código Electoral señala que para aspirar al cargo de presidente de la República, se requieren 39 mil 296 firmas mínimas. Pero no todos los que reúnan esa cantidad de firmas llegarán a la elección de mayo de 2024: solo los tres que más rúbricas logren se convertirán en candidatos.


LAS MÁS LEÍDAS