Los convencionales del Partido Panameñista aprobaron ayer, por aclamación, los cambios a los estatutos del colectivo de cara a las elecciones generales de 2014. El respaldo a las modificaciones, impulsadas por el presidente del colectivo, Juan C. Varela, se dio a pesar de que un grupo minoritario exigió que la votación fuera secreta, moción que no fue apoyada por la mayoría.
Para el evento se acreditaron 973 convencionales, de mil 259 que estaban habilitados, lo que representa un 77% de asistencia. La discusión de los cambios a los estatutos duró 1 hora y 50 minutos, ya que 34 convencionales se anotaron para expresar sus consideraciones sobre los nuevos cambios.
No habían pasado ni 15 minutos de debate cuando los ánimos se caldearon. Los convencionales Joel Lezcano y Gloria Young –esta última ex legisladora– exigieron que en el reglamento de la convención se plasmara que el voto sería secreto. En consecuencia, fueron abucheados por la mayoría de los convencionales.
Justamente cuando se discutían los estatutos, indígenas ngäbes derribaron la cerca perimetral del complejo deportivo de Los Naranjos, donde se desarrollaba la convención. Exigían la derogación de la Ley 8, que reformó el Código Minero y que respaldó la bancada panameñista en la Asamblea Nacional, con excepción de Jorge Alberto Rosas.
La acción no pasó a mayores: el vicepresidente de la República se comprometió a seguir dialogando con ellos sobre este polémico tema que incluso causó fricciones en el Gabinete.
En su discurso, Varela dijo que la próxima convención será en la comarca Ngäbe Buglé.
Llamó la atención que en su discurso Varela mencionara algunos logros del gobierno de Ricardo Martinelli, como el programa 100 a los 70 y el Metro Bus. “Tenemos que seguir trabajando con el presidente Martinelli y su equipo de gobierno, pero también tenemos que asegurar la reelección de este gobierno de alianza en 2014 para dar continuidad a estos proyectos que han sido exitosos”, sostuvo Varela.
