El jefe de la bancada legislativa del Movimiento Liberal Republicano Nacionalista (Molirena), Manolo Ruiz, confirmó que el diputado Jairo Bolota Salazar sí golpeó a su colega Kayra Harding, durante una reunión a puerta cerrada de las bancadas oficialistas, el pasado miércoles 22 de abril.
“Sí le pagaron el botellazo. Yo estaba ahí (…) ¿Qué querían? ¿Que cayera noqueada?”. Así, molesto, reaccionó el diputado del circuito 4-5 durante un programa en Radio Chiriquí, en el cual resaltó que en las redes sociales se ha criticado mucho a Harding supuestamente porque no tenía golpes visibles.
Al señalar que hay que dar gracias de que a la diputada no le rompieron los lentes, Ruiz corroboró la versión de Harding, quien ha señalado que la botella lanzada por Salazar sí la golpeó.
Estas declaraciones de Ruiz fueron “colgadas” en las redes sociales.
El secretario general del PRD, Pedro Miguel González, ha dicho que habló con por lo menos 15 diputados que presenciaron el incidente y que estos dan versiones contradictorias.
Salazar ha reconocido que lanzó la botella, pero que, según él, no iba dirigida a Harding. Además, amenazó con demandar a la periodista Jenia Nenzen por haber hecho comentarios sobre este hecho público.
El día del incidente, Harding declaró: “Estábamos en una reunión de bancada, había un intercambio de opinión con el diputado Mariano López. Lo invitó a pelear, le entró a puñete y le rompió la cabeza”.
Ruiz dijo que él no está ni con Harding ni con Salazar, pero que dio su testimonio para desmentir a quienes dicen que se trata de teatro de la diputada.
Harding presentó una denuncia por “violencia de género” ante la Corte Suprema de Justicia, que debe decidir si lo admite o no. Como parte de sus pruebas aportó lo que serían las palabras de Salazar, en la que aparecen insultos contra la diputada por su condición de mujer.
Además, la fiscalía de ética del PRD anunció la apertura de una investigación. Asimismo, la Comisión de Credenciales, que preside el perredista Roberto Ábrego, evalúa cómo manejar este caso, a petición del presidente de la Asamblea Nacional, Marcos Castillero.