La avalancha de votos que sacaron los independientes en las elecciones del pasado domingo 5 de mayo trastoca las agendas políticas históricamente predefinidas en el poder Legislativo. La Asamblea Nacional que se instalará el próximo 1 de julio tendrá 20 diputados independientes, un giro significativo en la política panameña.
De ese grupo, 19 pertenecen a Vamos, coalición impulsada por los diputados Gabriel Silva y Juan Diego Vásquez. El otro es Betserai Richards, quien logró un escaño sin estructura partidaria en el circuito 8-6, Panamá Este.
La voz de los independientes
El fenómeno, de acuerdo con Simón Tejeira, politólogo y coordinador de proyectos de la Fundación para el Desarrollo de la Libertad Ciudadana, refleja por lo menos dos cosas. La primera, explica, es el ojo que le puso la ciudadanía a diputados de la bancada independiente como Silva y Vásquez, quienes, asegura, trazaron una pauta de lo que se esperaba en términos del trabajo de fiscalización de la Asamblea. “Eso caló en la población”, dice. Y segundo, añade, denota la insatisfacción y desilusión con los partidos tradicionales.
Más allá de la esperanza por un cambio, una de las interrogantes que gravita por estos días es si ¿podrán los independientes llevar la voz cantante en el palacio Justo Arosemena?
Para lograr mayoría legislativa, se necesitan al menos 36 votos.
“Ojalá, aquellos que no tengo el placer de conocer, electos por todos los partidos políticos, lleguen a trabajar y a entender esa orden que nos dio el pueblo”, manifestó Juan Diego Vásquez un día después de la celebración de los comicios, mensaje que invita a unir fuerzas.
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Según Tejeira, hay una “real posibilidad” precisamente por la posición debilitada en la que se encuentran los partidos tradicionales, de que se conforme una alianza entre los independientes y diputados de otras agrupaciones para trabajar juntos.
“Tendríamos una Asamblea prácticamente dividida entre los de libre postulación y los de partidos tradicionales. Yo pensaría, en términos de buena fe, que viendo los resultados de las elecciones, los partidos tradicionales verán esto como una señal para trabajar más o menos al son de lo que han estado haciendo la bancada independiente”.
Los números y las fuerzas
A los 20 independientes, se les unirían los tres diputados del Movimiento Otro Camino (MOCA), colectivo que lidera el excandidato presidencial Ricardo Lombana. Eso sumaría 23 diputados. De acuerdo con cálculos del abogado Rodrigo Noriega, el número crecería si se unen los ocho del Partido Panameñista, los dos del Partido Popular, e incluso si se consigue un puñado más de los 8 diputados de Cambio Democrático (CD).
“Se sobrepasaría el mágico número de 36, es decir, Vamos y sus otros aliados controlarían la Asamblea Nacional”, añadió.
La sombra y el rol de Martinelli
En el Partido Panameñista, ya están considerando aliarse con los independientes.
“A nosotros nos gustaría mucho más una alianza con Vamos. El PRD no sé qué quiere hacer, sin embargo, por ambos lados hay algo de miedo, porque no se sabe si Juan Diego va a controlar los 20 votos que tiene”, aseguró una fuente del Partido Panameñista que solicitó no ser citado.
Añadió además que lo más importante es ver qué quiere el presidente de la República, José Raúl Mulino, quien fue electo por los partidos Realizando Metas y Alianza, dos colectivos que siguen la línea del expresidente Ricardo Martinelli, el hombre que impulsó la candidatura de Mulino, y quien está atrincherado en la embajada de Nicaragua para evadir la condena de 128 prisión por blanqueo de capitales, por el caso New Business.
“Por un lado él (Mulino) está diciendo que todo está en orden, que a él no le importa sumar o restar en la Asamblea, que ese no es su problema, pero por otro lado tienes a un Ricardo Martinelli llamando a los diputados para buscar mayorías (...)”, reveló.
Pero, agregó, hay que determinar si el cabildeo que está haciendo Martinelli lo hace en nombre de Mulino, o es una estrategia para su propio beneficio.
También se pregunta sobre lo qué podría ocurrir en CD. “¿Rómulo (Roux) va a poder controlar a sus diputados?, lo más seguro es que no, o que no controle ni la mitad. Muchos serán afines a Martinelli”, vaticinó.
Sin embargo, dijo que si se juntan Vamos, MOCA, los del Partido Panameñista, los del Partido Popular y un grupo pequeño de CD, se tendría mayoría contra el gobierno y el PRD y otros aliados.
“Lo más importante aquí es si el gobierno va a venir a matraquear duro o no, para conseguir la mayoría o si a Mulino no le va a importar que un Vamos sea presidente de la Asamblea”, añadió.
Simón Tejeira apunta a que la bancada independiente podría votar en bloque por un candidato en particular y tal vez, por la aceptación ciudadana que están teniendo en este momento, otros (de partidos políticos) se les unan. “El peso de la aprobación popular está sobre los independientes y tal vez algunos partidos, tratando de montarse en esa ola, se sumen”, añadió.
Coincide con Rodrigo Noriega y con la fuente del Partido Panameñista en que a los independientes se les podría sumar el Partido Popular, los panameñistas y algunos de CD.
¿PRD-RM?
¿Podrían unírseles algunos del PRD y RM? Tejeira dice que todo es posible, sin embargo, recuerda que en los últimos días “han estado sonando piedras en el río...de que una alianza PRD y RM podría ser un contrapeso para los independientes”.
De acuerdo con el sistema de Transmisión Extraoficial de Resultados, del Tribunal Electoral, la correlación de fuerzas en el Legislativo está así: 20 independientes, 14 de RM, 13 del PRD, 8 de CD, 8 del Partido Panameñista, 3 de MOCA, 2 del Partido Popular, 2 de Alianza y 1 del Movimiento Liberal Republicano Nacionalista.
Contrapesos
Betserai Richards, diputado electo del circuito 8-6, afirma que la próxima Asamblea va a tener un rol fundamental tomando en cuenta el estilo de gobierno que tendría Mulino. “Con 20 independientes tenemos la labor fundamental en generar un contrapeso, fiscalizar el buen uso de los recursos del Estado verificar que cada uno de los ministros, viceministros, directores de instituciones del Estado, cumplan con lo establecido por la ley.
Richards apuesta porque en el Legislativo prevalezca una asamblea que represente directamente los intereses de todo el país. Contó que Vásquez y Silva se comunicaron con él, y hablaron de definir una hoja de ruta. “Hay luchas como la de la modificación al reglamento de la Asamblea, que sería una de las primeras en impulsar”, dijo a La Prensa. “Tenemos muy principios muy similares”, aseguró para referirse a la coalición Vamos.
Eduardo Gaitán, el diputado más votado el pasado 5 de mayo, y uno de los integrantes de Vamos, asegura que el reto para todos será el de poder establecer puentes. “En el momento en el que un diputado de otro partido presente una propuesta buena para la comunidad tiene que aceptarse y apoyar esa propuesta. Entendiendo esto, a todos nosotros nos va a ir muy bien”, manifestó.