El Parlacen le cuesta al Estado $2.3 millones anuales: cada diputado recibe $4,900 al mes

El Parlacen le cuesta al Estado $2.3 millones anuales: cada diputado recibe $4,900 al mes
La sede del Parlacen está en Guatemala. Archivo


A pesar de la controversia y la mala fama que rodea al Parlamento Centroamericano (Parlacen), los últimos cinco expresidentes de Panamá han optado por juramentarse como diputados en este organismo. El más reciente en adelantar gestiones para hacerlo fue Laurentino Cortizo, quien presidió el país entre 2019 y 2024.

Cortizo presentó una solicitud formal para asumir su curul, siguiendo los pasos de sus predecesores. Este movimiento reaviva el debate sobre el verdadero rol del Parlacen, un organismo frecuentemente criticado por la falta de resultados concretos y por los beneficios que otorga a sus miembros, incluidos la inmunidad y los privilegios.

Aunque sus decisiones no son vinculantes, este organismo cuenta con una bancada de parlamentarios que disfruta de los mismos privilegios e inmunidades que los diputados de la Asamblea Nacional, lo que ha generado controversia sobre su función y utilidad.

Además, el Parlacen representa una carga significativa para el erario panameño, al requerir un importante presupuesto anual que muchos ciudadanos cuestionan, dado el limitado impacto tangible de su gestión en la región.

Datos de la ejecución presupuestaria del Ministerio de Relaciones Exteriores, que reposan en el portal de la Autoridad Nacional de Transparencia y Acceso a la Información, indican que cada año Panamá hace un aporte al Parlacen de $2.3 millones.

De hecho, el Parlacen se sostiene a través de las cuotas anuales que aportan los Estados miembros, incluidos Panamá, Guatemala y otros países de la región. Estos fondos se destinan, en gran parte, al pago de los salarios de los parlamentarios, quienes representan a sus respectivas naciones en un organismo frecuentemente criticado por su falta de transparencia y la poca relevancia de sus decisiones.

A pesar de que el salario exacto o los ingresos totales de los 20 diputados panameños que integran el Parlacen son poco conocidos, el diputado Dorindo Cortez, aspirante a la vicepresidencia del organismo por Panamá, reveló algunos detalles al diario La Prensa que podrían dar pistas sobre la suma total.

En palabras de Cortez, entre salario, dietas y viáticos, cada diputado tiene ingresos aproximados de $4,900 al mes, aunque podrían verse reducidos a $4,500 si no viaja a la sesión que realizan todos los meses en Guatemala.

El diputado del organismo internacional aclaró que no todos esos ingresos van a parar al bolsillo de los diputados, ya que de allí deben pagar el vuelo hacia Guatemala, así como el hospedaje en zonas seguras y su alimentación.

“Al final no nos quedamos con la suma total porque tenemos gastos durante las reuniones, las cuales pueden demorar toda una semana”, puntualizó Cortéz.

La juramentación

La juramentación de los diputados del Parlacen es un proceso reglamentado que se divide en dos dimensiones clave, explicó el diputado Dorindo Cortez. Por un lado, están los diputados electos, como los 20 representantes panameños, quienes pasan por un proceso de validación en una comisión antes de ser juramentados en la asamblea plenaria del Parlacen. Por otro lado, se encuentran los expresidentes y exvicepresidentes que, tras culminar sus mandatos, tienen derecho a integrarse al organismo regional y también deben cumplir con el proceso de juramentación correspondiente.

Según Cortez, para que un expresidente o vicepresidente sea juramentado, primero debe solicitar formalmente su inclusión en la agenda del Parlacen. Esta solicitud pasa por un organismo interno. Solo tras este paso, los exmandatarios pueden ser oficialmente juramentados. Este proceso se lleva a cabo durante las sesiones plenarias, siempre que se cumplan todas las formalidades y no existan impedimentos legales.

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El expresidente Laurentino Cortizo solicitó ser juramentado. Archivo

Cortez indicó que el Parlacen ha cumplido con su obligación de juramentar a los expresidentes de la región que lo han solicitado, tal como lo establece el tratado constitutivo de este organismo.

Caso Panamá

Respecto a Panamá, Cortez señaló que algunos de los expresidentes de la era democrática que se han juramentado en el Parlacen incluyen a Mireya Moscoso (1999-2004), Martín Torrijos (2004-2009), Ricardo Martinelli (2009-2014) y Juan Carlos Varela (2014-2019). En el caso de Varela, si bien no lo hizo una vez dejó el cargo en 2019, se juramentó este año tras ser postulado y escogido a lo interno de su partido.

La bancada panameña está integrada por 20 diputados, que no son escogidos a través de una papeleta, sino que son indirectamente elegidos a través del voto que recibe cada candidato presidencial. Cada partido postula una lista cerrada, conformada a dedo.

El partido político que más curules obtuvo para ese polémico foro regional fue Realizando Metas (RM), con 9 diputados. Le siguió el Partido Popular con 5, mientras que la libre postulación (por la candidatura presidencial de Zulay Rodríguez) obtuvo 2 curules. El Partido Revolucionario Democrático (PRD), el Partido Panameñista, el Movimiento Liberal Republicano Nacionalista (Molirena) y el Partido Alianza obtuvieron una curul cada uno.

Además, el Tratado Constitutivo del Parlamento Centroamericano establece que los presidentes de los países miembros, al concluir su mandato, tienen un puesto en el Parlacen, al igual que su vicepresidente.

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Los expresidentes Martín Torrijos, Ricardo Martinelli, Juan Carlos Varela y Laurentino Cortizo. Archivo

A la pregunta sobre si Panamá debería retirarse del Parlacen, como han sugerido algunos críticos que ven en el organismo una “cueva de ladrones”, Cortez defendió el papel del Parlacen como un foro para discutir problemas de seguridad y cooperación regional.

Para figuras públicas como el diputado de Vamos, Luis Duke, Panamá debe salir del Parlacen. “No tiene sentido estar en un lugar que no brinda ningún tipo de valor al país, más que ayudar a los corruptos que deben pagar por sus delitos. Presidente [José Raúl Mulino], cuando hay voluntad política, todo es posible. Yo estoy dispuesto a apoyarlo en esto”, apuntó.

El propio presidente José Raúl Mulino dijo esta semana: “Lamento en el alma y qué más quisiera yo firmar un decreto sacándonos del Parlacen hoy, pero no puedo hacerlo”.


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