Antes el escandaloso otorgamiento de “auxilios económicos” no reembolsables, a través del Instituto para la Formación y Aprovechamiento de Recursos Humanos (Ifarhu), en La Prensa quisimos conocer la experiencia de los panameños que solicitaban becas ante esta entidad. Sobraron las quejas y los mensajes de frustración de quienes requerían fondos para estudiar y nunca les atendieron.
En su mayoría, los comentarios relataban que intentaron obtener algún tipo de beneficio para estudiar, pero la respuesta de los funcionarios e incluso del entonces director del Ifarhu, Bernardo Meneses, era que no había cupo para becas o que debían sustentar sus ingresos familiares para poder adquirir un auxilio económico.
“Yo pedí un auxilio económico y el mismo Meneses me dijo que eso ya no existía. Que el Gobierno anterior se encargó de dar eso a diestra y siniestra y que ellos lo habían eliminado. ¿Cómo resultaron las cosas no?”.
“Si y me pidieron 21 mil papeles y lo más importante que debía demostrar que los ingresos familiares no podían cubrir la suma de 70 mil dólares para estudiar medicina..... Luego vi que le regalaban la plata a los que sí podían pagar.. Y se me pasaron las ganas de volver a intentar”.
“Yo pedí por 5 años una beca y siempre me respondía la misma persona que los cupos ya estaban cerrados!!! Y la convocatoria no había abierto, en fin, dejé eso porque ya sentía que era lo mismo de siempre y hablo de varias administraciones, no solo de la actual”.
Una investigación de La Prensa, sin embargo, reveló que entre julio de 2019 (cuando Laurentino Cortizo tomó posesión como gobernante) y mayo de 2023, el Ifarhu repartió $141.6 millones entre 2,144 beneficiarios de su programa de auxilios económicos. Entre los afortunados estaban hijos de funcionarios, políticos y personas allegadas al poder.
“Fui varias veces para averiguar sobre los requisitos de los auxilios y préstamos, desde el portero hasta el que te atiende te hace una pregunta: ¿De parte de quién vienes? La trabajadora del departamento de auxilios proactivamente me recomendó buscar un contacto en el gobierno porque era muy difícil conseguir algo solo por buena fe. No volví más obviamente”.
“Yo fui a solicitar una beca para una maestría; una funcionaria me dijo: voy a hablar claro, si no traes una recomendación de un político no pierdas tu tiempo... Solo eran unos miserables 4,500 dólares comparados con los auxilios que ellos dieron a su gente”.
“Gané beca Senacyt en 2016, no pude hacer uso de ella porque me pidieron codeudores, fui a hablar con la directora del Ifarhu en su momento y me dijo que no me podían dar un auxilio económico porque esos solo llegaban a 30,000 dólares y mi beca era por un monto más alto (Gobierno de Varela), terminaron quitándome la beca. En 2021 (Gobierno de Nito), pedí un préstamo para estudiar una maestría en España y me dijeron que necesitan codeudores sí o sí. Les pedí que me dejaran poner una cuenta de ahorro como garantía y me dijeron que no, les dije que cómo me ayudaban, ya que había ganado beca y no pude irme, pedí préstamo y tampoco; y la respuesta fue: dile a un político que te ayude”.
Por otro lado, algunos reportaron que sí lograron acceder a los beneficios por parte del Ifarhu, aunque tuvieron inconvenientes con los pagos, a algunos se les retiró la ayuda o no les cubría la totalidad de los estudios y tuvieron que recurrir a préstamos.
“Sí, un préstamo que ya termine de pagar estoy esperando que me terminen hacer el papeleo… y un auxilio cuando fui a estudiar al exterior neurología pediátrica pedí una suma, por lo menos puedo decir que me dieron el 30% de lo que solicite en el 2016 y me dijeron así: es que no te podemos dar todo por qué hay que darle a más personas. Lo comprendí, me endeudé por el restante… Pero al leer que se lo dan por más de 100,000 dólares a personas cuyas carreras no aportarán nada a la nación. Me da rabia”
“Me quitaron mi préstamo porque me lesioné y no pude presentar progreso académico. Tuve que abandonar la carrera”.
“La experiencia de mi hijo ha sido fatal. Demoran en pagar a la universidad. Demoran en enviar el dinero para los gastos. No envían las constancias de pago a los estudiantes y después está el problema que si falta algo, uno no tiene cómo justificar. Entre al Ifarhu y a la Contraloría, la peor experiencia de mi vida, no puedo creer cómo sacan los auxilios tan rápido, me lo dicen y no lo creo”.
“Fui puesto de honor en mi promoción, promedio de 4.85. Gané una beca por puesto distinguido. Más tarde concursé para las becas de Medicina de Minsa-Ifarhu. Tuve que concursar con más de 300 aspirantes, tuve que hacer 4 exámenes (biología, física, química y matemáticas), solo escogen a 150. Si quedas entre esos todavía tienes que pasar un curso propedéutico de 6 meses. Finalmente, si quedas entre los 120 que escogen, tienes la beca. Después de eso se demoran una eternidad... Te dan una ayuda aparte de lo que pagan a la universidad y es un montón de papeleos. He ido un montón de veces al Ifarhu y me dicen que yo tengo que esperar que me llamen. Tenía 2 becas, ambas me las gane estudiando mucho y me dicen que solo puedo quedarme con una”.
La Prensa logró armar una base de datos con los nombres de algunos de los beneficiarios del programa de auxilios económicos. Sin embargo, hay otros 2,759 desembolsos cuyo beneficiario se mantiene en secreto.
