La Comisión de Asuntos Municipales de la Asamblea Nacional aprobó este martes 19 de marzo, en primer debate el proyecto de ley 1138 que crea el distrito especial de Bastimentos en la provincia de Bocas del Toro, y además, da vida a tres nuevos corregimientos allí: Bahía Honda, Quebrada Sal y Solarte.
Rupilio Ábrego, suplente del diputado perredista Benicio Robinson, presentó la iniciativa de ley, aunque rehusó dar declaraciones sobre el tema a La Prensa.
El veto
Es importante recordar que en junio de 2022, el presidente de la República, Laurentino Cortizo, vetó en su totalidad una propuesta similar, argumentando, entre otros puntos, que el distrito propuesto no contaría con la población requerida para constituirse. El sustento al veto hace referencia al incumplimiento de la Ley 65 de 2015, la cual establece que para la creación de distritos se deberá contar con una población de, al menos, 25 mil habitantes.
Según el censo de población, el corregimiento de Isla Bastimentos apenas alcanza los 2,589 habitantes. Además de lo relativo al número de habitantes, el Ejecutivo alegó que tampoco existe constancia de la consulta pública ciudadana ni del informe socioeconómico y financiero del Ministerio de Economía y Finanzas.
Con el fin de fortalecer el desarrollo y sostenibilidad de las comunidades de la Isla Bastimentos, el HDS. Rupilio Ábrego presentó la iniciativa que crea el Distrito Especial de Bastimentos, segregado del distrito de Bocas del Toro. pic.twitter.com/q9rt4PZCNR
— Asamblea Nacional (@asambleapa) January 25, 2024
Como distrito, Bastimentos recibiría transferencias directas de fondos de descentralización y contaría con un Consejo Municipal que manejaría su propio presupuesto y los fondos de la descentralización. Actualmente, Ashburn Dixon Santos, del Partido Revolucionario Democrático (PRD), es el representante de ese corregimiento bocatoreño.
No se trata de pocos recursos. El próximo año, al Programa de Obras y Servicios Municipales se destinarán $84.8 millones, mientras que al IBI se le asignarán $102.6 millones.
El primero asigna $110 mil a cada una de las juntas comunales y alcaldías que tiene Panamá. La Ley 66 de 2015, que modificó la Ley 37 de 2009 sobre la descentralización en la administración pública, dispone que el 70% de esos fondos deberá ser usado en proyectos de inversión, mientras que el 30% restante será para funcionamiento. En tanto que el IBI otorga un mínimo de $500 mil a cada municipio, dinero que proviene de lo recaudado en el impuesto de inmueble correspondiente al año inmediatamente anterior.
Precisamente, el pasado 12 de marzo cuando esta propuesta fue prohijada, Dixon Santos defendió la iniciativa de ley y subrayó que de los 24 sitios turísticos que tiene Bocas del Toro, 10 están ubicados en Bastimentos, cuya región cuenta con una “amplia cultura, folclor, zonas marinas protegidas, flora y fauna”.
La justificación
Se consultó al diputado del PRD y vicepresidente de la Comisión de Asuntos Municipales, Luis Cruz, quien dijo que la importancia de cualquier proyecto de ley va a depender del interés de la gente que se va a beneficiar.
“En este caso, habría que preguntar a la población de Bastimentos si esto los beneficia o no”, acotó.
Cuando se le preguntó a Cruz sobre los cuestionamientos contra la Asamblea Nacional por crear corregimientos sin planificación, respondió: “Si lo que buscan es tratar de demeritar o desacreditar el trabajo que hace la Asamblea Nacional, siempre caemos en ese error”.
Además, argumentó que en esta ocasión no hubo debate, porque el proyecto de ley fue abordado el pasado 12 de marzo cuando fue prohijado.
Voceros de la sociedad civil como Olga de Obaldía, directora de la Fundación para el Desarrollo de la Libertad Ciudadana, capítulo panameño de Transparencia Internacional, han planteado que estas modificaciones obedecen a criterios políticos y no técnicos.
“Cada corregimiento nuevo representa, hasta donde entiendo, más de $300 mil adicionales al erario público como mínimo, sin contar la distribución discrecional de la descentralización”, acotó de Obaldía en su momento.
Además de este proyecto de ley, a la Asamblea Nacional han llegado este año otras tres iniciativas legislativas que en total implican la creación de tres nuevos distritos y 16 nuevos corregimientos en las provincias de Panamá, Bocas del Toro y Darién.