La histórica plaza de San Juan de Dios, en Santiago, provincia de Veraguas, fue el epicentro del cierre de campaña de Rómulo Roux, candidato presidencial de la alianza entre Cambio Democrático y el Partido Panameñista.
A diferencia de los demás aspirantes al Palacio de Las Garzas, Roux fue el único que celebró su cierre de campaña en el interior del país, quizás intentando mandar un mensaje al electorado de las provincias en la recta final de este proceso electoral que tiene como fecha clave el próximo 5 de mayo, cuando los votantes podrán acudir a las urnas.
Con un sol ardiente y en el contexto del Día de Trabajador, el evento donde se concentraron unas 15 mil personas comenzó a las 3:00 p.m., con la participación de dos artistas de música urbana: Italian Somalí y Jorkan.
Roux estaba acompañado por su esposa Victoria Heurtematte de Roux, y por sus hijas. Y como era de esperarse, por su compañero de fórmula y presidente del Partido Panameñista, José Isabel Blandón. Al horizonte, los simpatizantes ondeaban banderas de los colectivos que integran la alianza política.
En el acto también estuvo Guillermo Willie Bermúdez, candidato a la Alcaldía de Panamá, quien subrayó que durante estos últimos cinco años las provincias del interior y el país en general se han mantenido en el “olvido”. Pidió el voto para Roux.
Después tomó la palabra Blandón: “estamos a cuatro días de las elecciones y hoy cerramos una campaña en la que debemos sentirnos orgullosos porque nos unimos como partido y dejamos de lado aquellos que nos separaba”, manifestó.
En palabras del presidente del Partido Panameñista, como colectivo le dieron “prioridad” al país al tomar la decisión de apoyar a Roux. “Podríamos haber participado por separado pero tendimos la mano a un pacto más amplio. Lo hicimos porque entendemos que los retos a los que nos enfrentamos no son fáciles. Nos aliamos para cambiar este país y que no haya diferencia entre provincias”, acotó el político.
La tarde transcurría y un cúmulo de nubes se asentaron sobre la icónica placita, mientras el candidato a vicepresidente instaba a los presentes a salir a votar el próximo 5 de mayo cuando se habiliten las urnas.
“En nuestro gobierno el interior va a ser una de nuestras prioridades”, aportó.
Alrededor de las 6:00 p.m. apareció en escena el candidato presidencial vestido con una camisa blanca, pantalón jeans y zapatillas. El ruido se tomó el lugar y acto seguido Roux tomó la palabra en el corazón de la provincia de Veraguas.
El aspirante a la silla presidencial arrancó su discurso agradeciendo a quienes le abrieron las puertas: “cerramos una campaña que me ha permitido volver a escuchar cara a cara a panameños en cada provincia, en cada comarca, en cada barrio”, dijo.
De acuerdo con Roux, hace 15 años decidió enfocarse en un objetivo de vida, sin embargo, hay algo que no ha cambiado: “sueño con un país de oportunidades para todos, donde los jóvenes puedan obtener su primer empleo y los productores puedan prosperar. Sueño con un país donde todos tengan los mismos derechos sin importar de dónde vienes o donde naciste”, dijo.
Para el candidato presidencial, el domingo “vamos a elegir” entre dos opciones: “o seguimos por el camino que vamos, con el mismo grupo corrupto que se roba la plata de las becas y de las obras que no construyeron, o votamos por el cambio que yo represento”, apuntó Roux.
También recordó cómo derrotó a personajes como Yanibel Ábrego y Benicio Robinson, quienes se aliaron en las primarias de Cambio Democrático para intentar “quitarle” el partido.
“Votar por nosotros es votar por la única opción que puede derrotar la alianza (no formal) entre los partidos Realizando Metas y el Partido Revolucionario Democrático (PRD)”, manifestó.
En cuanto a sus promesas de campaña, reiteró que creará 500 mil empleos en cinco años y eliminará el impuesto sobre la renta para los ingresos hasta $1,500 al mes. “Y si la persona gana más de eso, quedarás exonerado en esos primeros $1,500 dólares”, explicó. Igualmente prometió computadoras y becas para los estudiantes, así como comida accesible para la población, nuevas carreteras, el mejor sistema de salud de la región, una educación de calidad y agua las 24 horas.
“La verdadera independencia para gobernar es no depender de un sistema político y estoy capacitado para trabajar desde el primer día. Mi gobierno no será de confrontación ni de banderas políticas”, aseguró el candidato presidencial.
Entraba la noche en Santiago, y Roux cerró su discurso pidiendo nuevamente el voto al país. “Juntos vamos a cambiar Panamá”, dijo el aspirante a la silla presidencial. Así cerró su campaña y ahora la decisión estará en manos del electorado el próximo domingo.