Frank Ábrego, quien será el jefe de la cartera de Seguridad Pública del gobierno de José Raúl Mulino, se refirió al tema migratorio y al posible cierre de la frontera en Darién, entre Panamá y Colombia.
De hecho, uno de los desafíos más grandes que tendrá Ábrego en esta entidad será afrontar la crisis migratoria en Darién, especialmente con la promesa realizada por Mulino de “cerrar” la frontera para impedir el paso a miles de personas que cruzan la selva para llegar a Panamá y luego emprender la ruta hacia Estados Unidos.
Según Ábrego, “no es imposible” cerrar la frontera, pero subrayó que −al igual que en otros lugares con las mismas características− ya existen caminos, trochas y senderos. “No hay una trocha para el narcotráfico y otra para los indígenas de la zona. Utilizan las mismas rutas porque eso ya está establecido”, expresó.
A juicio del exdirector del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), sí es posible el cierre de ese cordón fronterizo, pero aclaró que tampoco se puede construir un muro que vaya desde el mar Caribe hasta el océano Pacífico.
“Esa idea de construir un muro es imposible, pero si mañana nosotros declaramos un cierre de frontera y establecemos los puntos de control donde podemos detener a los migrantes, entonces proceder con una deportación y repatriación, como el presidente habló, pienso que eso reducirá el volumen de migrantes en la frontera”, afirmó.
De acuerdo con datos del Servicio Nacional de Migración, hasta el jueves 9 de mayo, cerca de 150 mil migrantes irregulares habían ingresado al país a través de esa vía este año.
Ábrego fue el primer director del Senafront, cargo que ocupó hasta 2016. Antes de asumir el mando de esa entidad trabajó en la Dirección Metropolitana de la Policía Nacional, pero antes estuvo en las Fuerzas de Defensa. Allí ingresó en 1986, un año después de graduarse de la escuela militar General Francisco Morazán, en Honduras.
En medio de la campaña política para las elecciones del pasado 5 de mayo, Mulino dijo lo siguiente: “vamos a cerrar el Darién y vamos a repatriar a todas estas personas como corresponda, respetando los derechos humanos”.