A partir del próximo año se iniciará el establecimiento de dos puestos fronterizos binacionales entre Panamá y Colombia, adicionales a los dos ya existentes en la selva de Darién.
Así lo propuso este martes, 25 de octubre de 2016, el presidente Juan Carlos Varela a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, en una visita oficial que este último hizo a Panamá y que se concretó en la base del Servicio Nacional Aeronaval de Nicanor, en Metetí, Darién.
Los presidentes también pactaron aumentar la coordinación interagencial entre los estamentos de seguridad, migración e inteligencia, con el objetivo de enfrentar los flujos migratorios ilegales, el narcotráfico y el tráfico de armas, y con ello ejercer un mejor control en la frontera.
En materia comercial, Varela y Santos resolvieron que ambos ministros de Comercio sean los encargados de encontrar una solución integral al sobrearancel mixto que impuso Colombia en 2013 y que ha afectado a la Zona Libre de Colón.
POR UNA FRONTERA MÁS SEGURA
Panamá y Colombia firmaron este martes un memorando de entendimiento, que contempla nuevas medidas para fortalecer la lucha contra el narcotráfico y combatir el crimen organizado, así como la migración ilegal hacia Estados Unidos.
Una de estas medidas, que entrarán en vigencia a partir del próximo año, es el establecimiento de dos puestos fronterizos binacionales en los sectores de La Olla y La Balsa, adicionales a los dos ya existentes en la selva del Darién. Allí actuarán conjuntamente miembros de la fuerza pública panameña y la fuerza armada colombiana.
Justamente fue en esta provincia que el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, recibió ayer a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, para coordinar y priorizar acciones conjuntas en relación con los flujos migratorios irregulares que afectan la región, y combatir el narcotráfico y otras modalidades delincuenciales del crimen transnacional.
Ambos mandatarios estuvieron acompañados de sus estamentos de seguridad, migración e inteligencia. La reunión duró unas dos horas y tuvo lugar en la base del Servicio Nacional Aeronaval (Senan) ubicada en Nicanor, Metetí, provincia de Darién.
El encuentro entre las delegaciones tuvo como base los procedimientos operacionales vigentes, en el marco de la Comisión Binacional de Fronteras (Combifron).
En cuanto al narcotráfico y otras modalidades criminales, ambas delegaciones acordaron fortalecer la coordinación interagencial entre las autoridades de seguridad y migración en las áreas fronterizas.
En el aspecto marítimo, Panamá acordó ayer la compra a Colombia de dos buques de apoyo logístico, que están siendo construidos por la empresa Cotecmar. Ello servirá para fortalecer el blindaje en materia de seguridad en los océanos Pacífico y Atlántico, así como también en materia de servicios humanitarios.
TRATA DE PERSONAS, PROBLEMÁTICA REGIONAL
El tema de los migrantes en situación ilegal fue uno de los puntos fundamentales del encuentro. Varela y Santos entienden que es prioritario mejorar el intercambio de información para identificar a los migrantes. Además, se propuso la creación de un fondo regional de contribuciones voluntarias para afrontar el problema y la búsqueda del apoyo de terceros países como destino de los viajeros.
“Vamos a tomar medidas para desincentivar estos flujos irregulares y la trata de personas, mediante el intercambio de información. Vimos las rutas que son usadas y tomaremos las medidas para desincentivar estos flujos”, apuntó Varela, y agregó que “hemos decidido subir un nivel a esa colaboración para ser más efectivos”.
Según Varela, el intercambio de información con Colombia ayudará a detener a las redes criminales que se dedican a la trata de personas por los corredores humanos que ya están identificados por ambas autoridades. “Empezamos a ver una tendencia a disminuir la cantidad de migrantes que tenemos en nuestros refugios en este momento”, dijo.
Información del Gobierno panameño indica que unos 15 mil migrantes en situación ilegal han pasado por el país en lo que va del año.
Santos, quien fue recientemente galardonado con el Premio Nobel de la Paz, alegó que cuando no hay colaboración, los delincuentes son los que aprovechan las fronteras para incrementar sus actividades y negocios. Afirmó también que “en la frontera con Panamá hay tráfico de drogas, de personas, de minería ilegal, de armas, lavado de activos”.
“Pusimos en marcha planes concretos para que entren en vigencia en 2017. Tenemos dos meses para hacer la planeación y dimos las instrucciones para que comiencen a operar estas nuevas modalidades de colaboraciones en 2017”, puntualizó.
TEMA COMERCIAL, EN MANOS DE MINISTERIOS
Desde que la Organización Mundial del Comercio (OMC) falló a favor de Panamá en noviembre de 2015, en torno a una disputa comercial por un arancel mixto a la importación de textiles, confecciones y calzados por parte de Colombia, el país sudamericano no ha acatado el fallo. Tampoco lo hizo cuando en junio de este año el organismo ratificó dicha decisión.
Este fue uno de los temas que se trató en la reunión. Varela y Santos resolvieron que los ministerios de Comercio de cada país sean los encargados de encontrarle fin a la disputa.
El Ministerio de Comercio e Industrias ha insistido en varias ocasiones que la medida sea removida de manera inmediata.
Colombia, en cambio, se encuentra en un proceso de discusión con su sector privado para encontrar otra herramienta que ayude a combatir el contrabando. El presidente Santos subrayó: “hemos dado instrucciones a los ministerios de Comercio para que se reúnan y ver qué paso siguiente podemos dar para normalizar la situación”.
Sobre esta medida colombiana, la OMC designó a un árbitro a mediados de septiembre, que será el encargado de establecer si Colombia debe quitar la medida automáticamente o dispondrá de un plazo prudencial para que lo haga. Dicho veredicto podría conocerse a finales de este mes.
El sobrearancel mixto perdería vigencia el próximo 1 de noviembre. Sin embargo, y como ya sucedió en dos ocasiones este año, Colombia podría reactivar otro plazo de cuatro meses.
Cifras de interés
15 mil
Migrantes en situación ilegal han atravesado Panamá en lo que va del año en su camino hacia Estados Unidos. Muchos de ellos han sido cubanos y haitianos.
2
Buques para apoyo logístico acordó comprar Panamá a la empresa colombiana Cotecmar.