Como parte de las acciones para estrechar las relaciones diplomáticas entre Panamá y Estados Unidos en diferentes sectores, la embajadora estadounidense en Panamá, Mari Carmen Aponte, y el subsecretario adjunto para América Central de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, Eric Jacobstein, se reunieron con el ministro de la Presidencia, Juan Carlos Orillac.
Uno de los temas abordados en el encuentro que se realizó este miércoles en el Palacio de Las Garzas, fue el flujo migratorio irregular por la selva de Darién, frontera con Colombia.
La Presidencia informó en un comunicado que los funcionarios estadounidenses buscan estrechar los lazos de amistad y reafirmar el interés de su gobierno en apoyar a Panamá ante la situación que existe con el flujo irregular de migrantes por el Tapón del Darién.
Actualmente, ambos gobiernos están desarrollando un memorándum de cooperación para la repatriación y deportación de migrantes de diferentes nacionalidades.
Aponte recordó el drama humano que se vive con los migrantes que llegan a Panamá y que esas historias de supervivencia tras cruzar la selva “nos llegan al alma”.
Jacobstein ponderó las buenas relaciones diplomáticas que existen entre ambos países, así como el liderazgo de Panamá en la región, y expresó que espera seguir “trabajando conjuntamente y continuar hablando sobre los países de la región”.
Además, destacó los esfuerzos que realiza Panamá para salir de las listas discriminatorias.
Por otra parte, el ministro Orillac resaltó el apoyo del gobierno estadounidense con las 250 cirugías de cataratas que se realizarán en abril de 2025. Además, mencionó que en junio de 2025 se prevé la visita a Panamá de uno de los barcos hospitales para atender cirugías más complejas.