El Instituto de Formación, Aprovechamiento de Recursos Humanos (Ifarhu) decidió flexibilizar el requisito de índice académico necesario para participar en un subprograma especial de auxilio económico, que permite a estudiantes universitarios hacer pasantías en universidades del exterior para reforzar sus conocimientos.
Los cambios del subprograma denominado Movilidad Estudiantil de Auxilio Económico se centran en dos aspectos: bajar el índice académico e incluir a las universidades privadas.
Los primeros cambios llegaron mientras la ciudadanía protestaba y presentaba denuncias por el uso de auxilios económicos otorgados a allegados de funcionarios y de políticos del gobernante Partido Revolucionario Democrático (PRD).
Mientras eso ocurría, el ahora exdirector de la entidad, Bernardo Meneses, quien aspira a ser diputado de Arraiján por el PRD, decidió bajar el índice académico para optar por esta ayuda.
“A fin de que en vez de 2.0 se tome el índice académico a partir de 1.8, cuando lo amerite”, dice la modificación planteada en la Resolución No. 320-2022-1111 de 12 de septiembre de 2022.
No obstante, el mes pasado, antes de abandonar el cargo para ir a hacer política, Meneses hizo otro cambio a dicho programa. Ahora para incluir a alumnos de universidades particulares, según la Resolución No. 320 del 6 de febrero de 2023, en la que Meneses alega que con esto se pretende abarcar “la mayor cantidad de estudiantes posible”.
En dicha resolución, que fue publicada en la Gaceta Oficial el pasado jueves 2 de marzo, también se dice que “para el proceso de selección, las universidades oficiales y las universidades particulares, a través de la comisión evaluadora designada previamente por ellos (universidades), elegirá entre los estudiantes de sus sedes centrales y los centros regionales a nivel nacional en grupos de distintas cantidades hasta un total de 50 alumnos, lo que se efectuará a través de un acta de selección que contendrá el nombre completo y cédula del estudiante seleccionado, donde harán constar la firma de los miembros de dicha comisión, con el sello de la universidad.”
Desde el Ifarhu, ahora a cargo de Ileana Molo, sin precisar la cantidad de recursos invertidos en el subprograma, informaron que este se creó en marzo de 2022 con el objetivo de financiar cortas pasantías internacionales a los estudiantes universitarios que cursen sus últimos dos años de sus carreras.
Hasta ahora, según la entidad, han participado más de 400 estudiantes de distintas universidades, como la Universidad de Panamá, la Universidad Tecnológica de Panamá, la Universidad Autónoma de Chiriquí, la Universidad de las Américas y la Universidad Marítima Internacional de Panamá.
En ese sentido, el Ifarhu señaló que cada universidad se encarga del proceso de selección de todos estos jóvenes, que deben cumplir con todos los requisitos que establecen los lineamientos del programa.
Las denuncias sobre el uso de auxilios económicos para beneficiar a estudiantes que no lo requerían llegaron a la Fiscalía de Cuentas, a la Autoridad Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (Antai) y al Ministerio Público (MP), pues entre los beneficiados están la perredista Kathy Ramos, directora de Género de la Asamblea Nacional (con un auxilio de $15 mil); Paola Testa, hija de la diputada Zulay Rodríguez ($61 mil); Estefanía Guardia ($99,478), exnovia del diputado Juan Diego Vásquez, y María Alejandra Panay, hija del secretario general de la Asamblea Quibián Panay y antigua asistente de Meneses en el Ifarhu, entre otros.
Entre 2019 y 2022, el Ifarhu gastó $74.7 millones en auxilios económicos que fueron entregados a 5 mil 930 personas.
Recientemente, el presidente de la Asamblea Nacional, Crispiano Adames, reconoció el uso político que se le dio al programa de los auxilios económicos, por lo que presentó una propuesta de ley que modifica la norma por la cual se creó el Ifarhu. Plantea, por ejemplo, un nuevo requisito: que los beneficiarios reporten un ingreso familiar anual inferior a $50 mil. Ello implicaría contar con un estudio socioeconómico que justifique las necesidades.
Sin embargo, Meneses ha negado que las ayudas se hayan dado por amiguismo o politiquería. Incluso, ha dicho que todos los estudiantes -incluyendo los hijos de políticos o personas con recursos económicos- tienen derecho a aspirar a este beneficio.
