Desde la semana pasada Panamá ha recibido casi 300 migrantes procedentes de Estados Unidos (EU). Se trata de personas de nacionalidades diversas: Irán, China, Afganistán, Siria, entre otros.
Están hospedados en el hotel Decápolis, ubicado a pocos pasos de la Avenida Balboa. En conferencia de prensa, el ministro de Seguridad Pública, Frank Ábrego, informó que la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la ACNUR son los responsables de su repatriación.
Ábrego, al igual que el presidente José Raúl Mulino, aseguró que los gastos médicos, los alimentos, entre otros, son financiados por EU.

Los planes del gobierno de José Raúl Mulino incluye trasladarlos a un albergue migratorio en Darién para, desde allí, enviarlos a sus países.

Así se encuentran los migrantes; son 297 hombres, mujeres y niños, y están hospedados en el hotel Decápolis, ubicado a pocos pasos de la Avenida Balboa.https://t.co/rLx5Yn2AoO pic.twitter.com/0JxXgB39OV
— La Prensa Panamá (@prensacom) February 18, 2025

Los migrantes deportados llegaron al país en un periodo marcado por las tensiones entre Panamá y Estados Unidos, debido a la amenaza del presidente de EU, Donald Trump, de retomar el control del Canal de Panamá alegando supuesta injerencia de China en su operación. Durante la visita que realizó el secretario de Estado de EU a Panamá, Marco Rubio, el tema migratorio fue puesto sobre la mesa. El presidente José Raúl Mulino anunció que Panamá deportaría migrantes de EU a través de una pista en Metetí, Darién.