La Universidad de Panamá, a través del Centro de Diálogo Social y la Defensoría de los Estudiantes Universitarios, aceptó asumir la responsabilidad de coordinar la Mesa del Diálogo por Panamá creada por el Ejecutivo en julio pasado en medio de las protestas de sectores sociales en reclamo de mejor calidad de vida.
A través de un comunicado de la Arquidiócesis de Panamá, liderada por José Domingo Ulloa, el equipo facilitador de la iglesia católica confirmó la información.
Desde el inicio de este diálogo, el 21 de julio de 2022 la iglesia católica ha actuado como facilitador. Sin embargo, los facilitadores han advertido que en la segunda fase su papel sería solo de observador, de acompañantes.
Según la información, el coordinador del Centro de Diálogo Social, Vasco Torres y su equipo, se comunicarán con los actores sociales y el gobierno de Laurentino Cortizo para manifestarles su disposición en contribuir con su experiencia y conocimiento a la segunda fase.
Además de la Escuela de Diálogo Social de la Universidad de Panamá y la Defensoría Universitaria de la Universidad de Panamá, el equipo facilitador de la iglesia cursó solicitudes a la Conferencia Episcopal Panameña (CEP) y a la Organización de las Naciones Unidas.
Obispos solo tendrán papel de observadores
El presidente de la CEP, Rafael Valdivieso, señaló -en respuesta a la solicitud realizada- que la iglesia tiene la misión de encontrar caminos de reconciliación, por lo que seguirá acompañando el proceso de diálogo como observadora.
Con respecto a las Naciones Unidas, se hizo la invitación, pero debido a que es un organismo internacional, requiere que la solicitud la haga el Gobierno Nacional, lo que ya se le solicitó a la Cancillería, que dirige la ministra Janaina Tewaney Mencomo.
Una vez que se cuente con la preparación de la logística necesaria y los equipos técnicos se podrá dar inicio formal a la segunda fase, informó el comunicado.
En la primera fase del diálogo el Ejecutivo y el Bastión de Lucha Oriente Chiricano, Alianza Pueblo Unido por la Vida y Alianza Nacional de los Derechos del Pueblo Organizado acordaron ocho puntos: canasta básica, combustible, medicamentos, educación, energía, Caja de Seguro Social, corrupción y las llamadas mesas intersectoriales y de seguimiento.
Se esperaba que en la segunda fase se incluyeran a otros sectores, como los empresarios. Pero hasta ahora la falta de un coordinador ha impedido retomar las conversaciones.
La Cámara de Comercio, Agricultura e Industrias de Panamá ha dicho, por ejemplo, que un diálogo debe estar enmarcado en el respeto hacia las personas y a la dignidad del ser humano, buscando llegar a acuerdos constructivos que logren el bienestar común. “Ya que sin estos elementos nada productivo puede surgir de encuentro alguno”, señaló.