BECARIO. No se sabe si al ministro Alberto Vallarino le gusta o no el programa de becas especiales Ifarhu/MEF. Así como criticó públicamente a algunos beneficiarios del programa (como Virgilio Periñán Herrera y David Saied Torrijos), otorgó una ampliación del monto de la beca que benefició a Vittorio Calcagno (retoño de la ministra Giselle de Calcagno). El hijo ahora labora en el sector privado, y no en el Estado. Moraleja: si usted no quiere que lo asoleen, mejor póngase sus zapatillas.
PREMIO. El ministro Pepe Suárez viajó a Madrid para recoger la medalla “al mérito internacional”, que esta noche le otorga la Asociación Española de la Carretera (AEC). Según una nota de prensa de AEC, se hace acreedor al galardón “por las importantes reformas políticas y de planificación que está llevando a cabo en su país”. Qué importa que en la Unesco no quieran saber de él.
SHOW. Ayer, en un acto en el Teatro Nacional con educadores del país, el presidente Martinelli le contó a una sorprendida concurrencia que cuando era candidato, “retó” a Lucy Molinar para que fuera su vicepresidenta, y ella le respondió que quería ser ministra de Educación. “¿Ministra de quéee?”, afirmó el propio Martinelli que le contestó. “Ahora sí estás loca”, agregó. El mandatario se refirió al noticiero que en aquella época conducía Molinar como una “corregiduría” en la que “destruía como hilachas de carne” a sus entrevistados. Si lo que dice el Presidente es verdad, esto significa que mientras repetía a su teleaudiencia no tener interés político alguno y no ser “ficha” de nadie, ya Molinar había adquirido compromisos con un candidato presidencial. Definitivamente este no es el Ricardo de I love Lucy.