Ironías de la vida. Mientras el fútbol femenino federado está arrinconado y su torneo de clubes olvidado, en Panamá las mujeres siguen jugando este deporte de forma masiva.
Solo hace falta pasarse por cualquiera de las canchas sintéticas para darse cuenta de la cantidad de mujeres que juegan al fútbol.
Este año la Asociación Nacional de Fútbol Femenino no tuvo torneo por falta de apoyo económico, mientras que la Federación Panameña de Fútbol está recién preparando un equipo sub 17 para una eliminatoria regional, después de un largo receso a raíz de la suspensión por indisciplina de algunas jugadoras que estuvieron con la selección en los Juegos Deportivos Panamericanos de Río de Janeiro, en 2007.
Pero esto no ha sido motivo para que las mujeres se hayan olvidado del fútbol. Las ligas se organizan en cualquier lugar y la muchedumbre se toma las gradas para verlas jugar
José Chino Rodríguez, administrativo de Punto Penal de Vía España, dice que un promedio de 200 mujeres juegan fútbol en un mes, con ligas que organizan ellas mismas.
En una noche de fútbol femenino, el establecimiento no se da abasto para la cantidad de personas que van a verlas jugar.
Rodríguez manifiesta que las mujeres son más ordenadas que los hombres cuando organizan las ligas. Siempre están uniformadas, mientras que a los hombres hay que llamarles la atención para que luzcan la vestimenta adecuada.
