En sus primeros cuatro meses de gestión, el presidente José Raúl Mulino utilizó $790,000 de la partida discrecional que se le asigna a su despacho.
Un informe de la Presidencia de la República detalla que en el mes de julio el presidente usó $116,033. De ese monto, por ejemplo, $23,851 fueron para gastos médicos y $52,025 para mitigación de desastres.
En el mes de agosto, el mandatario desembolsó $83,972. De ese total, $78,361 fueron para la compra de equipos del departamento de comunicaciones.
Para el mes de septiembre, gastó $346,923, de los cuales $21,045 fueron cubrir gastos médicos a menores de edad y personas consideradas de escasos recursos. En tanto, $202,926 fueron destinados para mitigación de desastres y $122,951 para el renglón de “otros”, incluyendo la restauración del Palacio de las Garzas.
El informe destaca que para octubre Mulino utilizó $243,026. De ese total, $170,073 fueron para el renglón de mitigación de desastres.
Desde el 1 de julio de 2019 hasta mayo de 2024, el expresidente Laurentino Cortizo manejó $31.2 millones de esta partida discrecional. Esto es más que lo que gastaron sus antecesores Ernesto Pérez Balladares (1994-1999), Mireya Moscoso (1999-2004) y Martín Torrijos (2004-2009), pero menos que los desembolsos realizados por Ricardo Martinelli (2009-2014) y Juan Carlos Varela (2014-2019).
-Pérez Balladares: $25 millones.
-Moscoso: $23 millones.
-Torrijos: $22.3 millones.
-Martinelli: $55.7 millones.
-Varela: $41.7 millones.