Anyuri tiene 16 años y sí, algo sabe sobre sexualidad.
Estudiante de décimo grado de la escuela Profesional Isabel Herrera Obaldía, Anyuri explica que el profesor de ética es el único en su grado que aborda temas como el noviazgo, las relaciones sexuales, la anticoncepción, el aborto y el uso del preservativo, pero siente que la información debería llegar antes.
“La otra vez vinieron a dar una charla, pero a las de sexto año, y muchas de ellas ya están embarazadas... Deben dar las charlas desde primer año, antes de que comiencen [a tener relaciones sexuales]”, opina.
Even también tiene 16, pero no ha tenido la suerte de Anyuri: “A mí ningún profesor me habla de sexualidad”, asegura el joven.
“Por ahí”, cuenta, conversa en tono de relajo con sus compañeros sobre el tema, pero nada más. “Hablamos sobre las noviecitas, que a dónde las llevaron, que qué les hicieron... Algunas se dan a respetar, otras no. Los muchachos les piden la prueba de amor...”.
Desde el 1 de diciembre y a propósito del Día Mundial contra el VIH/sida, el Ministerio de Salud (Minsa) lanzó la campaña “Yo decido”.
En palabras de la directora de Promoción de la Salud, Carolina Freire, la campaña “forma parte de un esfuerzo programático que promueve la abstinencia, la fidelidad y el uso del preservativo, junto con la educación en valores”.
La estrategia se enlaza con los resultados presentados recientemente en la Encuesta nacional de salud sexual y reproductiva 2009 (Enasser), en donde se destaca que los panameños conocen sobre el VIH pero poco hacen para protegerse.
“Muchos no reconocen la abstinencia ni la fidelidad como forma de prevención y tampoco usan el condón”, comenta Freire.
Y la investigadora principal de la encuesta, Ruth De León, va más allá: “los resultados de Enasser nos dicen que hace falta más educación y comprensión”, afirma.
