El proceso de repatriación de migrantes indocumentados que ingresan a Panamá, por la selva del Darién, iniciará en las próximas semanas según anunciaron funcionarios del gobierno de Estados Unidos, en una conferencia de prensa este martes 2 de julio.
Estados Unidos se encargará de esos vuelos que forman parte de un plan piloto acordado con Panamá para disuadir a los aproximadamente 1,200 migrantes diarios provenientes de países como Venezuela, Ecuador y Haití, quienes cruzan la frontera del Darién rumbo al norte.
“La situación en el Darién es insostenible y en muchos casos trágica”, dijo Marcela Escobari, asistente especial del presidente de Estados Unidos, Joe Biden y asesora de la Casa Blanca en materia de migración.
“Esperamos que esta acción disuada a los migrantes de ponerse a sí mismos y a sus familias en el gran riesgo que implica cruzar el Darién y el resto de esta trayectoria”, dijo a través de una videoconferencia.
Desde enero de 2024 hasta el pasado 27 de junio del presente año se ha registrado el paso 195 mil 817 migrantes irregulares por esta inhóspita y peligrosa zona que conecta Panamá y Colombia.
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El gobierno del presidente Biden aportará $6 millones al gobierno panameño para entrenamiento, asistencia técnica y el costo de los vuelos de los migrantes a sus países de origen, de acuerdo a funcionarios del Departamento de Estado y el Departamento de Seguridad Nacional.
Se desconoce la cifra de migrantes diarios que serían repatriados a diario con este plan piloto. Tampoco queda claro si Estados Unidos administrará estos fondos o si las autoridades panameñas serán los encargados de gestionar el uso de los fondos.
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Los detalles iniciales del plan piloto de repatriación llegan un día después de que el Secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos Alejandro Mayorkas y el presidente José Raúl Mulino firmaran un “memorando de entendimiento” para abordar la crisis migratoria en el Darién.
Mulino aprovechó la visita de Mayorkas, parte de la delegación de Estados Unidos que asistió a su toma de posesión el 1 de julio, para firmar el acuerdo bilateral.
