Yanibel Ábrego, el centro de un escándalo de tierras del Estado

Yanibel Ábrego, el centro de un escándalo de tierras del Estado


Reclutar ciudadanos para pertenecer a un partido político en la mayoría de los casos tiene mucho más que ver con lo que se obtiene a cambio que lograrlo por simple simpatía.

La compra de una finca de 15.7 hectáreas en Lídice –distrito de Capira– revela una multiplicidad de formas de obtener provecho político de fondos estatales, que pasó, precisamente, por la inscripción de ciudadanos en un partido político.

La compra del mencionado terreno –por medio millón de dólares– la hizo en 2011 la junta comunal de El Cacao, un lejano y abandonado caserío rural en ese corregimiento de Capira, pero que no pasó inadvertida para la diputada Yanibel Ábrego (Cambio Democrático - CD) que, según una investigación de este medio, destinó a esa junta comunal casi $8 millones de los $9.4 millones que recibió en concepto de partida circuital autorizada en el gobierno de Ricardo Martinelli (2009-2014).

La cara visible de la compra de la finca es la del hoy exrepresentante del corregimiento de El Cacao, el copartidario de la diputada Ábrego, Tomás Herrera, quien pidió a este medio dirigirse a esa funcionaria cuando semanas atrás se le preguntó sobre la compra de la finca.

El terreno representó ventajas políticas para varios, menos para los habitantes de El Cacao, quienes solo sirvieron de excusa para destinar los $500 mil a la compra de la finca, pues ninguno de ellos recibió un lote.

Provecho personal

Para empezar, los primeros beneficiarios de los lotes que resultaron de la segregación de la finca fueron un hermano de la diputada Ábrego y dos de sus primos: Luis Rey Ábrego, el hoy alcalde de Capira, Jorge Ramos (2 lotes) y la hermana de este último Neddeissa Ramos (1 lote), respectivamente. Así, los lotes pagados con fondos estatales permitieron hacer inversiones a la familia de la diputada, con segundas casas, y hasta alcanzó para construir locales comerciales, en el caso del alcalde Ramos.

Y no fueron los únicos. Otros familiares de la diputada Ábrego que recibieron su respectivo lote pagado con fondos estatales en el nuevo barrio de El Progreso fueron Aracelly Carranza Smith, Icela Jaramillo Smith y Leydis Medina Smith de Ávila, tías y prima de la diputada Ábrego, respectivamente.

Jaramillo Smith es funcionaria de la Autoridad Nacional de Administración de Tierras (Anati) en Capira, desde enero de 2010, mientras que el esposo de Medina Smith, Rafael Ávila, está actualmente nombrado en la Asamblea Nacional (AN), donde también está nombrada su hija Mintoys Ávila, con el cargo de asistente de la diputada Ábrego, con salario de $3,500.

Los lotes también habrían servido para reclutar ciudadanos que serían beneficiados con los terrenos. De esta forma, la tierra –pagada con fondos estatales– sirvió también para engrosar las filas de un partido político: CD.

A su vez, los que recibían un terreno debían, según lo acordado, aportar una cuota de nuevos adherentes, que buscaban en las respectivas familias de los nuevos propietarios de los lotes.

Otra ventaja obtenida de recibir un lote es trabajar en la campaña permanente de la diputada, según revelaron algunos entrevistados por este medio.

Provecho político

La Prensa revisó el padrón electoral del distrito de Capira, así como el proceso de segregación de las 15.7 hectáreas de tierras en el corregimiento de Lídice de ese distrito, efectuado por Herrera (CD), el entonces representante de El Cacao.

Resultado: 202 títulos de terrenos encontrados en el Registro Público fueron segregados por la Anati desde agosto de 2012. Del total de beneficiados con títulos de propiedad de esos lotes, 129 personas están inscritas en CD; 9 en el Partido Revolucionario Democrático (PRD) –aunque se desconoce desde cuándo– y otras 3 en el Partido Panameñista.

¿Qué pasó con el resto? Una fuente al tanto de la forma en que se repartieron los lotes y que prefirió el anonimato por temor a represalias afirmó que, “una vez que terminó el gobierno de Martinelli y de Juan Carlos Varela, muchos de los beneficiados sintieron que no habían obtenido más nada de lo prometido por la diputada Ábrego, como, por ejemplo, un trabajo. Así que renunciaron al partido [CD]. No había más nada que los atara a CD. Por eso es que no los verás en el padrón electoral, pero, si miras de manera general, el CD es el partido con más inscritos en Capira”.

La fuente dijo que “este es un proceso fácil. La condición de la ‘patrona’ es que si quieres beca, trabajo y medicinas, tienes que estar inscrito [en el partido] y hacer campaña a favor de ella. Así es como se paga. Y si llegas a ser nombrado en la Asamblea Nacional, entonces las cosas cambian. Ahí tienes que demostrar lealtad y meter una cuota de entre cinco y 10 familiares en CD”.

Otros entrevistados admitieron que, en pago por el terreno, deben “salir a la calle a repartir enseres para regalar en las actividades de la diputada [Ábrego]… y no cambiarte de partido”, además de aportar nuevos militantes a ese colectivo político.

Más pistas sobre Ábrego

Una revisión del trámite de inscripción de la finca de 15.7 hectáreas de Lídice, efectuado en el Registro Público por el abogado Ranfis Aguilar, pone en duda lo alejada que dice estar la diputada Ábrego de la compra de este terreno y su posterior segregación en lotes, regalados a varios de sus familiares y a una gran mayoría de simpatizantes de su partido.

La inscripción de la compra de la finca en Lídice fue ingresada al Registro Público en horas de la tarde del 29 de marzo de 2011. En esos documentos se encuentra un recibo de pago de $1,262 en efectivo, entregados por Aguilar al Banco Nacional, a favor del Registro Público por la inscripción de la compra del inmueble (ver facsímil).

El abogado Aguilar también aparece en sociedades con Ábrego y su esposo, el secretario general de la Asamblea Nacional (AN), Quibian Panay. Por ejemplo, en Desarrollo e Inversiones Turísticas Pty, S.A. –creada en marzo de 2019– Aguilar es el agente residente de esta sociedad, mientras que los esposos Ábrego y Panay son secretaria y presidente, respectivamente (ver facsímil).

En esta sociedad aparecen otros familiares de Panay y de Ábrego, como Mintoys Ávila, sobrina y empleada de la diputada en la AN.

Desarrollo e Inversiones Turísticas es la razón social de Paradise World desde marzo de 2021. En su aviso de operación aparece que Panay indicó que Desarrollo e Inversiones Turísticas se ubica en Santa Rosa de Capira, vía principal hacia Cermeño, es decir, la misma dirección de la lujosa residencia que comparte con Ábrego.

La Prensa preguntó a Ábrego desde cuándo conoce al abogado Aguilar, con el que mantiene sociedades anónimas ella y su esposo. Ábrego afirmó que “es falsa la información vertida en esta pregunta. Mi esposo y yo no mantenemos sociedades anónimas con el señor Ranfis Aguilar”, aseguró.

Aguilar también es uno de los dos vicepresidentes de la Asociación Pro Desarrollo del Distrito de Capira (Aprodeca), en la que el alcalde de Capira –primo de Ábrego– es el tesorero.

Aprodeca es una sociedad privada conformada también por funcionarios de la Asamblea que trabajan directamente con Ábrego, como su sobrina Mintoys Ávila y el esposo de ella, Adnan González, asistente de Ábrego en la AN, con salario de $3,000. Ambos aparecen en esa sociedad con los cargos de presidenta y vicepresidente, respectivamente.

Además, Aprodeca cuenta con otra asalariada de la AN: Itzel Arosemena, secretaria en esta sociedad y también en el despacho de Ábrego, en este último, con salario de $4,000 al mes.

Más organizaciones

Una fuente del despacho del alcalde Ramos informó que Aprodeca maneja fondos municipales. Meses atrás, La Prensa pudo ver vehículos estatales identificados con el nombre de Aprodeca en el centro político de la diputada Ábrego (ver foto).

Pasadas las 8:00 a.m. del martes 14 de junio, este medio abordó a Mintoys Ávila en su casa, pero pidió que se le enviara un correo con las preguntas.

Cuestionada sobre la norma que permite a Aprodeca administrar fondos y bienes municipales, Ávila dijo que “es falso que Aprodeca administre fondos públicos”, pero que la organización “brinda capacitaciones, apoyo personal, social y emocional”.

¿Dónde se guardan los vehículos oficiales que administra Aprodeca?, preguntó La Prensa. “Usualmente, en el corregimiento de Lídice”, dijo Ávila, evadiendo ser específica.

La funcionaria también negó que Aprodeca funcione desde el centro de campaña de Ábrego, pero tampoco pudo especificar dónde se encuentran sus oficinas ni de dónde provienen los fondos para operar, ya que dijo que es una “asociación sin fines de lucro, que trabaja públicamente por y para las comunidades y su crecimiento personal...”, en la que ella trabaja “voluntariamente”, al mismo tiempo que lo hace para la Asamblea Nacional, donde sus funciones, según dijo, “están sujetas a lo que la institución dispone”.

Por otro lado, moradores de Lídice, donde La Prensa ubicó dos vehículos oficiales en la sede de una organización llamada “Semilla de Esperanza”, expresaron a este medio que esta oficina permanece cerrada.

Semilla de Esperanza ha recibido, tanto la atención de Ábrego, como de autoridades de fiscalización. Por ejemplo, en junio pasado –indicó una fuente–, personal de Contraloría se apersonó al lugar, ya que “recibe fondos públicos de varias instituciones”. Entre 2017 y 2018, en este lugar se recibían, cada dos meses, alimentos del Ministerio de Desarrollo Social, como lo publicó en su página web la misma institución.

A su vez, la diputada Ábrego, en dos comentarios que hizo en 2017 y 2018, se vinculó a la organización. En unos de sus comentario en Twitter en 2018, dijo: “Seguimos en contacto con nuestra gente, a través del proyecto ‘Semilla de Esperanza’, donde se atienden a unos 106 niños de las escuelas de Lídice, además de los adultos que se benefician de los diferentes cursos de capacitación”.

¿Prestó usted su centro de campaña para que se organizaran donaciones o gestiones municipales a través de Aprodeca?, preguntó La Prensa a Ábrego. “No existe un centro de campaña en Capira. Es falsa la información contenida en esta pregunta, nuestras oficinas no manejan recursos de Aprodeca y mucho menos del Municipio [de Capira]”, aseguró.

Su sobrina, Mintoys Ávila, no quiso referirse a las otras sociedades en las que comparte directiva con la diputada Ábrego y el alcalde Ramos, al considerar que son parte de sus actividades particulares y familiares. Tampoco quiso referirse al proceso que se le sigue a ella y a su esposo en la Fiscalía Anticorrupción por la presunta comisión de delitos contra el orden económico en perjuicio del Estado.

Ya han pasado 10 años desde que se entregó el primer terreno gratuito con fondos públicos en El Progreso de Lídice, lo que permite a sus dueños venderlos a medida que se cumple este plazo.

Pese a que pueden hacerlo, varios consultados por este medio no se atreven, ya que no tienen a dónde ir. “Esto es un negocio, puro juega vivo y nosotros lo sabemos, pero tenemos que aguantarnos por ser pobres”, se justificó uno de los beneficiados de los lotes.

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