La técnica de colocar barreras flotantes para retener los desechos se replicó en el río Escarrea, corregimiento de Santo Tomás, el distrito de Alanje, provincia de Chiriquí.
La iniciativa fue llevada adelante por la Organización Panameña por la Vida y el Ambiente (Opava) con la asesoría técnica de la asociación Marea Verde, la cual implementó la tecnología de barreras flotantes en el río Matías Hernández en 2019, en el río Tapia en 2020 y en el río Juan Díaz en 2022.
Desde la instalación en junio de 2023, las barreras flotantes en el río Escarrea han retenido al menos 15 mil libras de residuos contaminantes, el 65% de los cuales corresponde a plástico y el 30% a plástico proveniente del uso de agroquímicos, según los informes de Opava.
La iniciativa de Opava surge de una propuesta presentada a la organización Our Ocean, durante la conferencia homónima celebrada en Panamá el 2 y 3 de marzo de este año, que resultó ganadora de fondos para la instalación de dos barreras, una en la cuenca media y cuenca baja del río Escarrea, con el apoyo técnico de Marea Verde.
De acuerdo con el Censo 2010, dentro de la cuenca del río, habitan 34 mil 15 personas que se benefician de la cuenca, por lo que es crucial para el desarrollo económico a través de generación de energía, ganadería, agricultura y producción de agua para acueducto rural.
En septiembre de 2022, Marea Verde comenzó operaciones de “Wanda Díaz”, una rueda que utiliza energía hidráulica para remover los desechos del río Juan Díaz previniendo que lleguen al mar y un “BOB”, o una barrera flotante que ayuda a detener los desechos y los redirige hacia donde está Wanda para su clasificación, correcta disposición y reciclaje. Desde entonces, Marea Verde ha recolectado del río Juan Díaz más de 25 mil libras de plástico para reciclaje.

