Cuatro niños, entre los 3 y 8 años de edad, luego de días desaparecidos, fueron encontrados sin vida la noche del sábado 1 de julio de 2023. Sus cuerpos (osamentas), uno al lado del otro, se hallaron en un área de difícil acceso en la comunidad de Arionte, corregimiento de Río Chiriquí, distrito de Kusapín, comarca Ngäbe Buglé.
Así lo confirmó la activista Lucy Córdoba, defensora de los derechos de los niños, quien detalló que junto a la osamenta de los niños también se encontró muerto, en estado de descomposición, al padre de las víctimas. Se presume que se haya quitado la vida.
A través de la cuenta de Twitter, el Ministerio Público informó que personal de la Fiscalía Regional de Bocas del Toro se dirigía al área de Río Chiriquí para verificar la existencia de osamentas en ese sector e iniciar las investigaciones por delito contra la vida y la integridad personal.
#PGNInforma| Personal de la Fiscalía Regional de Bocas del Toro se dirige al área apartada de Río Chiriquí en la Comarca Ngäbe Buglé, para confirmar la existencia de osamentas en ese sector e iniciar las investigaciones por delito contra la Vida y la Integridad Personal. pic.twitter.com/qlTFNRMBJW
— Procuraduría General de la Nación (@PGN_PANAMA) July 2, 2023
¿Qué ocurrió?
De acuerdo a informes preliminares, el padre asesinó a sus cuatro hijos y posteriormente se quitó la vida. Todo apunta a un caso de violencia vicaria, cuyo fin era causarle daño a la mujer, la madre de sus hijos, expresó Córdoba.
“No tengo palabras... duele demasiado”, expresó, a la vez que exigió una vez más un “alto a la violencia”.
Vecinos del lugar indican que pudo deberse a una disputa intrafamiliar, ya que la mamá de los niños se fue de la casa por razones aún no esclarecidas.
“Luego de conversar con allegados al lugar, nos informan que el padre mandó al niño mayor, de ocho años, a buscar a la madre, pero el niño le advierte a su mamá que su padre estaba afilando un cuchillo y posiblemente la quería matar. Ésta, con temor se aleja”, explicó Córdoba.
“Fue entonces que el padre partió con los niños, tres niñas de 3, 4 y 6 años y el mayor, el niño de 8 años. Se creyó que estaban con algún familiar. Jamás se imaginaron que el padre los asesinaría. Es posible violencia vicaria. Encuentran los cuerpos, tenían aproximadamente 14 días de haber partido de la casa”, indicó la reconocida activista.