Surge otro elemento que no fue incluido en la declaración notariada de bienes que presentó el exministro de Desarrollo Social, Guillermo Ferrufino, en julio de 2014, cuando abandonó el cargo público que ocupó los últimos cinco años.
Ferrufino reconoció que se dedica al negocio de la ganadería. Su hato es de unas 100 cabezas, según contó en una entrevista que transmitió Telemetro Reporta esta mañana.
En su declaración patrimonial, el exfuncionario incluyó un caballo valorado en $25 mil (que dijo fue un “obsequio” de su etapa como ministro). Ni una sola mención de su ganado.
Al presentar una declaración incompleta, podría estar incurriendo en el delito de falsedad. Ferrufino ya dijo que ampliará su declaración ante la Contraloría, donde ya los fiscales anticorrupción presentaron una denuncia en su contra por posible enriquecimiento injustificado.
Los animales, contó, los tiene pastando en una finca en La Chorrera, propiedad de la familia Lymberópulos, con quien dice tener una gran amistad.
“A veces tú tienes cabezas de ganado en fincas que en algunas ocasiones te las alquilan mensualmente o te las prestan para mantener el pasto [de la finca] y que no se dañe”, señaló.
En su declaración notariada no hay constancia del “alquiler”; tampoco de los ingresos o egresos derivados del pastoreo de su hato en una finca supuestamente ajena.
Tampoco fue incluida una finca llamada “La manga vieja”, de una hectárea, donde construyó una “cabañita” de 130 metros cuadrados, valorada –según él- en $40 mil. La propiedad –dijo- le costó $25 mil, porque fue “prácticamente” un regalo de Bredio Menéndez, el mejor amigo de su padre, un antiguo teniente coronel de las Fuerzas de Defensa.
Con anterioridad, Ferrufino había explicado que en su declaración no fueron incluidas sus residencias en Albrook y Coronado. Lo que sí aparece son las hipotecas de ambas propiedades: sobre la de Albrook pesa una hipoteca de $350 mil con la Caja de Ahorros; la de Coronado está hipotecada por $380 mil con el Banco Nacional de Panamá (BNP).
En la entrevista transmitida hoy, Guillermo Ferrufino reconoció que mensualmente paga $4 mil 400 en préstamos.
“¿De dónde sale esa plata? ¿Usted está trabajando?”, le preguntó el periodista Álvaro Alvarado.
“Yo tengo ahorros”, replicó el entrevistado.
Ferrufino dijo que tiene un plazo fijo “de seis cifras”, que no es un “mendigo”.
“Puedo mantener la deuda que tengo con lo que tengo en el banco”, recalcó.
Agregó que su esposa Milena “ha trabajado por varios años. Tiene su negocio de piedrería fina, que no le ha ido mal”.
También expresó su intención de estudiar una carrera universitaria; le gusta la psicología. No se refirió a su futuro político, y dijo que algún día explicará por qué no participó en las elecciones de mayo de 2014, cuando se le mencionó como candidato a la alcaldía capitalina de Cambio Democrático (CD) y hasta como aspirante presidencial.
