Al culminar este domingo la Jornada Mundial de la Juventud Panamá 2019, el arzobispo metropolitano, José Domingo Ulloa destacó que esta actividad no habría sido posible sin el apoyo de cada uno de los habitantes del país y de los miles de voluntarios que “dejaron todo” para servir a este proyecto.
Ulloa expresó que esta generosidad y acogida a los peregrinos y visitantes “desbordó toda expectativa”.
“Somos conscientes que muchas familias y parroquias hicieron un esfuerzo extraordinario, incluso una inversión económica, para acoger a peregrinos; pero no tuvieron la posibilidad de vivir la experiencia de este encuentro con ellos”.
Sin embargo, Ulloa les exhortó a que no se desanimen y compartan con aquellos peregrino cercanos, especialmente aquellos que son voluntarios internacionales que se quedarán por unos días en Panamá.
“Quienes vinieron nos permitieron redescubrir nuestras raíces, todo aquello bueno que nos identifica como pueblo, un pueblo alegre, amable, servicial y con una profunda fe”, resaltó Ulloa.
“Esta ha sido una verdadera primavera para la Iglesia como para la sociedad”, agregó en un comunicado.