Los jóvenes siempre buscan la verdad. Viven los auténticos valores éticos y morales. Tejen la paz cada día como herramienta para lograr el bienestar de los demás. Han pasado 35 años desde que Banco General, bajo el liderazgo de don Federico Humbert (q.e.p.d.), recogió este ideal como un compromiso y creó el Premio Valores Humanos y Morales.
El Premio Valores Humanos y Morales busca, cada año, reforzar en la juventud sus principios morales y modelar la conducta que los distinguirá como ciudadanos de bien. Así, bajo los valores que identifican a Banco General, se realizó la 34ava edición del evento el pasado jueves 3 de enero en la casa matriz de Marbella, donde 144 estudiantes graduados en 2018, de 72 colegios públicos y privados de todo el país, recibieron este premio y un agasajo, en presencia de la junta directiva del banco.
El reconocimiento se extendió, además, a los padres de los jóvenes, quienes estuvieron presentes para ser testigos del mismo y por ser los pilares del núcleo familiar donde se practican en primera instancia los valores.
El año 1985 fue declarado por la Organización de las Naciones Unidas, “Año Internacional de la Juventud, Participación, Desarrollo y Paz”, y dentro de este contexto, el Banco General, como empresa panameña, considerando que debía fomentar mejores valores en la sociedad tal como lo promueven dentro de su organización, inició este programa con los estudiantes graduandos de escuelas secundarias del país.
Ese año se premiaron alrededor de 50 estudiantes de sexto año de 25 escuelas secundarias públicas y privadas, cuya selección se hizo mediante una terna de compañeros y profesores por haber demostrado valores sobresalientes en los últimos años. Así, durante 34 años seguidos, Banco General cumple con esta labor de responsabilidad social empresarial en miras de seguir formando una juventud con propósito.
Ginny Boyd de Hoyos, vicepresidenta de Mercadeo de Banco General, sostiene que se tiene muy gratos recuerdos de esa primera camada de chicos sobresalientes y que se sigue en contacto con varios de ellos. Algunos, incluso, trabajan hoy en la entidad bancaria.
Los estudiantes que se seleccionaron para el premio destacan por sus acciones de honestidad, responsabilidad y respeto en sus relaciones con profesores y compañeros. Además, la solidaridad, el agradecimiento y la tolerancia guían sus vidas desinteresadamente.
Algunos de los ganadores nos dieron sus impresiones sobre la iniciativa:
Durante la ceremonia, hubo varios momentos especiales. Uno de ellos le correspondió a Carmen Nagar, abuela de la estudiante ganadora Liz Marie Ojeda Nagar, de la Academia Santa María de Colón, entregarle el premio a su nieta 20 años después de haberle entregado el mismo galardón, en el mismo lugar, a su hija Iris Sari Nagar, quien lo ganó en 1998. Que su nieta recibiera 20 años después el mismo premio que su hija, le emociona y se siente satisfecha de sus logros por su educación de los valores en el hogar. “Es el hogar donde se aprende los hábitos y las buenas maneras de conducirnos ante la sociedad”, destacó.
Otro momento especial fue que los jóvenes tuvieron la oportunidad de compartir sus testimonios de vida con los presentes. Gabriel López, de la Academia Interamericana de Panamá, sede Cerro Viento, por ejemplo, dijo que: “La iniciativa nos impulsa cada día a practicar los valores y cultivar el hábito del ahorro para los futuros proyectos que queramos emprender”.
Por su parte, Maybi Valdés, del Instituto Bilingüe Santa María de Bethania, compartió que: “La iniciativa de Banco General es excelente al reconocer los valores que practican los jóvenes que poco a poco se van perdiendo”.
Los demás ganadores definieron el Premio Valores Humanos y Morales como “una motivación para los jóvenes”, “un impulso a la gente para hacer cosas buenas”, “una iniciativa que invita a seguir el camino del bien”, entre otros.
Raúl Alemán Zubieta, presidente de Banco General, quien presidió la ceremonia, dijo a los jóvenes que este reconocimiento, el cual vino de parte de sus compañeros y profesores, debe ser atesorado para el resto de sus vidas, ya que de ahora en adelante tienen nuevos retos, responsabilidades y complejidades.
Durante la ceremonia les compartió una serie de reflexiones que pueden ser de gran valor en el nuevo excitante camino que cada uno de ellos empezará a recorrer en los próximos días, semanas y meses. Entre las reflexiones más sobresalientes estuvieron:
Alemán Zubieta, por su parte, instó a los jóvenes talentos a seguir el ejemplo de Warren Buffett, uno de los hombres más ricos de los Estados Unidos, quien vive en la misma casa desde 1958, maneja su propio auto y aconseja vivir una vida simple como uno se la debe hacer: “Gastar realmente lo que se necesita y no gastar lo que no se tiene... nada hemos traído al mundo al nacer, nada nos llevaremos al morir”.
