Los vecinos de Altos del Golf, en el corregimiento de San Francisco, evalúan interponer algunos procesos legales en contra de un permiso de construcción otorgado por el director de Obras y Construcciones de la Alcaldía de Panamá, Gonzalo Barrios.
Se trata de la plaza comercial Santa Elena Strip Mall, a cargo de la empresa BT Arquitectos, que contempla la edificación de 2 plantas que albergarán 16 locales.
Ricardo Del Valle, representante de la Asociación de Residentes de la Urbanización Altos del Golf, Loma Alegre y áreas aledañas, manifestó que la autorización se otorgó el 20 de julio de 2015, posterior a que entrara en vigencia la Resolución No. 486-2014 del 22 de agosto de 2014, publicada en la Gaceta Oficial 27611-A.
Dicho dictamen suspendió ocho cambios de zonificación que se dieron a último minuto durante el gobierno pasado, no solo en Altos del Golf, sino también en Villa Lilla.
Del Valle manifestó que “tanto el director de Obras y Construcciones, como el alcalde de la ciudad José Isabel Blandón no han prestado debida atención a la resolución”.
Añadió que tras una participación de miembros de la asociación en una sesión del Consejo Municipal de Panamá, se logró paralizar el proyecto. No obstante, el pasado mes de enero se retomaron los trabajos.
“Los residentes exigimos que la obra sea paralizada totalmente, ya que deseamos mantener la zona exclusivamente residencial”, sentenció Del Valle.
Agregó que los residentes han contratado dos firmas de abogados para evaluar sus opciones y presentar los recursos que sean necesarios ante la Corte Suprema de Justicia, a fin de evitar la edificación de la plaza.
Frente a las acusaciones, Gonzalo Barrios señaló que todo está en regla.
Detalló que los promotores del proyecto, BT Arquitectos, iniciaron los trámites ante la Dirección de Obras y Construcciones previo a que la resolución estuviera vigente, pero no se les aceptó el pago por una nota de “alerta” del Miviot en la que pedían no aprobar permisos para obras cuyos cambios de zonificación fueran del gobierno pasado.
Con respecto a la suspensión de tres meses, Barrios indicó que la paralización que se le hizo al proyecto no fue en función del uso de suelo, sino porque al momento que se le hizo una inspección no tenían a un profesional idóneo residente.
Añadió que tras revisar toda la documentación en conjunto con los miembros de la Comisión de Transparencia del Consejo Municipal, la empresa subsanará la situación y pagará la multa; por lo que “se unificó” la decisión de levantar la suspensión.
Representantes de la compañía BT Arquitectos informaron que hoy se pronunciarán.