Autoridades de la iglesia Católica llevaron a cabo este miércoles, 2 de octubre, un conversatorio con medios de comunicación donde dieron a conocer detalles de las investigaciones que mantienen contra sacerdotes involucrados en escándalos, sobre todo de índole sexual.
La actividad estuvo encabezada por el arzobispo, José Domingo Ulloa, quien comenzó pidiendo “perdón” por los últimos polémicos hechos en los que se ha mencionado a varios miembros del clero.
Según las estadísticas, que citó Ulloa, en los últimos 10 años han separado a ocho sacerdotes por diversos casos entre ellos abuso sexual a menores. Además detalló que actualmente hay cuatro miembros del clero separados e investigados.
“Se habla de la doble moral de la iglesia, pero la iglesia tiene una sola moral y es Jesucristo. Algunos miembros de la iglesia viven en doble moral, pero la iglesia vive en una sola moral. No tengamos miedo al sufrimiento. Esto que ha salido a luz es una oportunidad de purificación”, agregó Ulloa.
También reiteró que seguirán acompañando a los más necesitados. “Esta es una gran oportunidad para que los cristianos podamos vivir en la santidad. Al final la Iglesia es nuestra madre y lo que nos da la vida”, apuntó.
Por su parte, Manuel Ochagavía Barahona, obispo de la diócesis de Colón y Guna Yala y secretario de la Conferencia Episcopal, descartó que el celibato tenga que ver con estos escándalos sexuales en los que se mencionan a los sacerdotes.
“Esto tiene que ver con problemas que trae la persona antes de ser candidato a sacerdote y que sucede en toda la sociedad, no solo en la Iglesia”, manifestó.
En el caso de los abusos a menores (pedofilia) lo calificó como “grave” y consideró que es un trastorno a nivel sicológico.
“El bombardeo sexual en la sociedad está llegando a niveles aberrantes”, dijo el religioso.
Tras el último escándalo denunciado, el Ministerio Público a través de la Fiscalía de Atención Primaria empezó una investigación por la supuesta comisión del delito contra la libertad sexual, en la que se menciona a miembros de la Iglesia católica.
Los sacerdotes investigados en esta última denuncia son Rogelio Topin, Orlando Rivera y Karl Madrid, quienes fueron separados de sus funciones y deberes como presbíteros debido a "conductas inapropiadas y escandalosas".