En la urbanización Bosque de Las Cibeles, en el corregimiento Amelia Denis de Icaza, San Miguelito, sus residentes dicen estar a la espera de dos acontecimientos: que intervengan las colinas que se desmoronan o, de lo contrario, que ocurra una tragedia.
Hace meses los habitantes del lugar vienen denunciando que el terreno en la zona presenta inestabilidad. Solo la semana pasada, piedras y una avalancha de tierra dañaron una vivienda cercana a esa zona.
Sin embargo, hasta la fecha no reciben una respuesta, pese a la visita de entidades como el Ministerio de Obras Públicas (MOP), el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) y el Municipio de San Miguelito.
Javier Lange, uno de los residentes afectados, señaló que es “lamentable” que las entidades estén dilatando una pronta solución a un problema que puede dejar víctimas.
“Nos sentimos abandonados. Parece que esperan que muera alguien aquí para entonces actuar”, sostuvo.
Lange vive en la comunidad desde hace 10 años, junto con su esposa y dos hijos. A un costado de su vivienda un gran muro presenta rajaduras y está casi por colapsar.
Lange y otros afectados, pues ahora el terreno comienza a presentar desprendimientos, se niegan a salir del sitio, debido al elevado costo de las casas que supera los $300 mil.
ESPERAN SOLUCIONES
Sobre este tema, el ingeniero municipal de San Miguelito, Ricardo Sánchez, informó que en estos momentos el MOP elabora el diseño de las mejoras a los taludes en la urbanización, donde se reportaron deslizamientos la semana pasada.
Según Sánchez, una vez se cuente con esos diseños comenzarán a definir los costos de ese reforzamiento.
Debido a las denuncias de los vecinos afectados, el Municipio de San Miguelito abrió un expediente hace un año a la empresa responsable de esa urbanización, Grupo Colonias de Panamá, el cual no ha sido resuelto.
Este diario ha intentado conocer una versión de la empresa responsable, pero los encargados no han ofrecido una entrevista.
Según el ingeniero municipal de San Miguelito, antes de que culmine el año estarán definiendo la responsabilidad de lo ocurrido.
Informes de Ingeniería Municipal detallan que en San Miguelito hay cinco mil viviendas que están en zonas peligrosas. Incluso, en muchas de esas estructuras se han realizado intervenciones que representan una sobrecarga al terreno donde fueron edificadas.
“Nuestra sugerencia es que dejen de construir casas en sitios propensos a desastres, como deslizamientos o inundaciones. Además, que soliciten los permisos correspondientes, porque así evaluamos en qué tipo de suelo se construye”, añadió.
MOP NO INTERVENDRÁ
Por su parte, el ministro de Obras Públicas, Ramón Arosemena, detalló que ayer recibió el informe por parte de los técnicos de la entidad que evaluaron el área. No obstante, explicó que por el tipo de relieve de la zona se hace difícil ingresar con maquinaria al lugar afectado.
A la vez, expresó que por tratarse de un proyecto privado no pueden intervenir los taludes. “Podemos entregar el informe al Municipio de San Miguelito, pero será bastante complicado que la entidad intervenga”, dijo.
Organizaciones como la Red Ciudadana Urbana manifiestan que en este caso las autoridades no pueden dar las espalda a los residentes, porque fueron ellas las que entregaron los permisos para el proyecto residencial, entre esos: permiso de construcción, ocupación, estudio de impacto ambiental, el aval para el uso de suelo, entre otros.
Precisamente, el permiso de construcción para este proyecto fue entregado hace 10 años a la promotora, sin ningún tipo de oposición por parte de las autoridades. Esta urbanización está compuesta por cinco etapas y más de 120 viviendas.